El volcán Sangay, el más austral de Ecuador, generó un promedio de 22,5 explosiones leves cada hora, para un total de 542 en el último día, según informó este domingo el Instituto Geofísico (IG) de la Escuela Politécnica Nacional.
La actividad del Sangay se mantiene «alta» y sus últimas explosiones han generado una columna de emisión que ha ascendido a unos 800 metros sobre el nivel de la cumbre, que por efecto del viento ha tomado rumbo al oeste.
El IG, de momento, no dispone de reportes que indiquen que haya caído ceniza en poblaciones ubicadas en los alrededores de la montaña.
El Sangay, de 5.230 metros de altura sobre el nivel del mar, se ubica en la provincia amazónica de Morona Santiago (centro este), en un ramal de la cordillera andina.
Otro de los volcanes vigilados por el IG es El Reventador, situado en la provincia amazónica de Sucumbíos (noreste), también en un ramal andino que desemboca en la selva y que mantiene una actividad eruptiva constante desde 2002.
El Reventador presenta actualmente una actividad entre «moderada» y «alta» y en las últimas 24 horas ha generado un total de 21 explosiones, además de 41 sismos leves de «largo periodo», relacionados con el movimiento interno de fluidos, y 9 episodios de tremor de emisión de gases y ceniza.
Dichas emisiones han formado columnas en forma de nubes que han ascendido a unos 500 metros sobre la cumbre; mientras que en las noches se ha podido observar brillo de incandescencia en el cráter.
El Reventador, de 3.560 metros sobre el nivel del mar, forma una fila de volcanes en una zona montañosa amazónica cercana a la cordillera andina, junto al Pan de Azúcar, el Sumaco y los Conos de Puyo.
Por su parte, el volcán Cotopaxi, la segunda montaña más alta del país situada unos 45 kilómetros al sur de Quito, registró este domingo una reducida actividad volcánica, con 21 temblores de «largo periodo» y tres episodios de tremor por emisiones.
El último informe del IG sobre la situación en el Cotopaxi advirtió de que su actividad es moderada con tendencia a disminuir y precisó que la tarde ayer pudo observar una columna de emisión de vapor de agua de 400 metros sobre la cima.
La actividad del Cotopaxi, de 5.987 metros de altura sobre el nivel del mar, generó preocupación desde que inició su último pulso eruptivo en octubre pasado; sin embargo, en las últimas semanas esa condición ha remitido de forma considerable.
El IG mantienen una estrecha vigilancia del Cotopaxi, ubicado en la provincia andina del mismo nombre, por la amenaza que supondría una eventual erupción mayor para las poblaciones asentadas en su zona de influencia. EFE
