La presidenta de Perú, Dina Boluarte, anunció este viernes que la lucha contra el narcotráfico pasa a ser parte de la agenda central de su Gobierno y que enfrentará el crimen organizado y los delitos generados por el tráfico de drogas.
«Anuncio que la lucha contra el narcotráfico se incorpora desde este momento a la agenda central de mi despacho y que enfrentaremos el crimen organizado y los delitos conexos generados por el tráfico de drogas», dijo Boluarte en el discurso frente al Congreso con motivo del día de aniversario de la independencia del país.
Para perseguir este objetivo, anunció que van a producir nuevas metas de erradicación y desde el Gobierno van a incrementar el presupuesto destinado al desarrollo alternativo integral y sostenible.
La presidenta expuso que, en 2016, el país tenía 40.000 hectáreas de cultivos ilegales de coca, y que hoy esta cifra ha crecido hasta casi alcanzar las 100.000 hectáreas.
«Varios gobiernos han pasado y el escalofriante incremento de la coca ilegal no ha cesado; inclusive varios de los críticos de hoy estuvieron al frente de Ministerio del Interior, y fueron incapaces de detener el crecimiento exponencial del espacio cocalero, que ha convertido a nuestro país en uno de los principales exportadores de cocaína en el mundo», indicó.
Este junio, el último informe de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas de Perú (Devida) anunció que los territorios dedicados al cultivo ilegal de coca crecieron hasta las 95.008 hectáreas en 2022, una cifra récord y que supone un aumento del 18 % respecto al año anterior, cuando eran 80.681.
La organización destacó en ese momento que el crecimiento de áreas de cultivo de coca en el país se ha expandido en áreas naturales y de comunidades indígenas a las que denominan «territorios especiales», puesto que el narcotráfico es «un enemigo dinámico» que funciona como un modelo de negocio al buscar oportunidades para obtener «una mayor rentabilidad».EFE
