En el 70 % de los municipios fronterizos de seis países amazónicos hay grupos armados que controlan lucrativas rutas del narcotráfico y trafican con oro, lo que hace necesaria la cooperación transnacional porque, de lo contrario, «se perderá ante el crimen la selva más grande del mundo», alerta una investigación divulgada este jueves 3 de agosto de 2023.
Estos grupos armados y redes transnacionales del crimen llegaron a la Amazonía movidos por el tráfico de drogas y se quedaron porque encontraron otro negocio en el metal dorado, señala la investigación periodística del proyecto Amazon Underworld (el submundo amazónico).
«Luego de meses de investigación en algunas de las zonas más remotas de la Amazonía, y de hablar con cientos de personas, incluyendo traficantes de drogas, pandilleros y fuerzas de seguridad, la conclusión es clara: la falta de presencia estatal y el control que ejerce el crimen está teniendo un efecto devastador sobre las comunidades locales y el medioambiente», concluyó el periodista Bram Ebus, coordinador de la investigación.
Según Ebus, todo está «alimentado por las multimillonarias industrias del tráfico de drogas, oro y armas».
El proyecto Amazon Underworld reunió a 37 periodistas de once países que elaboraron un mapa que registra la presencia de grupos armados, organizaciones criminales y economías ilícitas en las zonas de frontera de la Amazonía en Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela.
Los periodistas recorrieron esa región selvática y mapearon una compleja red de grupos criminales que actúan sin control, y en ocasiones en colusión con actores estatales, los que está contribuyendo a la destrucción del área con más biodiversidad del planeta.
GOBERNANZA Y COOPERACIÓN
«Gobernar una zona tan vasta como la Amazonía es un desafío monumental, pero si las redes criminales logran gestionar un nivel de diplomacia criminal y colaboración tan sofisticado, los gobiernos también deberían poder hacerlo en sus esfuerzos de proteger la Amazonía», indicó Ebus.
En este contexto, la cumbre de presidentes que se celebrará la próxima semana en Belén (Brasil) para abordar los retos de los países amazónicos debe servir de escenario para «mejorar la cooperación», de lo contrario «la Amazonía se perderá ante el crimen y la destrucción ambiental», indica el estudio.
«La Cumbre de la Amazonía en Brasil presenta una oportunidad única para discutir estrategias sostenibles de largo plazo para abordar la seguridad en la selva más grande del mundo», agregó el principal investigador.
La base de datos, una introducción al contexto del submundo de la Amazonía y un artículo sobre la expansión de grupos ilegales que controlan la minería ilegal en el estado brasileño de Amazonas -limítrofe con Colombia, Perú y Venezuela- causando terribles daños ambientales, son las primeras entregas de una serie de artículos que serán publicados en el transcurso de agosto.
La investigación también aborda temáticas como las tácticas para evadir a las autoridades; los pueblos indígenas y cómo se ven involucrados con estas redes criminales o la connivencia con la fuerza pública de cada país para garantizar seguridad a estos grupos.
Además de Ebus, también han participado en la investigación los periodistas Juan Torres, Pamela Huerta Bustamante, Rodrigo Pedroso, María de los Ángeles Ramírez y Sam Cowie. EFE