Paula Torres no pudo decir a su madre que clasificó al Mundial de Budapest

Doña Martha Sarango partió a la eternidad dos días después que su hija obtuviera la medalla de plata en el Sudamericano de Brasil. La marchista azuaya quiere dedicarle su carrera en Budapest.

Paula Torres
Paula Torres entrenó el jueves tres de agosto en la pista del estadio Alejandro Serrano Aguilar. Foto El Mercurio/Bolívar Sinchi.

Paula Torres tiene una fortaleza increíble. Un día después de darle el último adiós a su madre Martha Sarango, se puso a órdenes del profesor Julio Chuqui para continuar con la preparación rumbo al Campeonato Mundial de Atletismo, en Budapest.

“Fueron meses muy duros porque mi mamá estaba bastante mal. Nos queda el consuelo de que ya no está sufriendo, de que ya está descansando con Dios”.

Su deceso se dio dos días después que Paula obtuviera la medalla de plata en 20.000 metros marcha durante el Campeonato Sudamericano Absoluto de Brasil. Ella estuvo siempre pendiente de su hija y se puso feliz por el resultado.

Paula, aunque cargaba una gran tristeza, nunca borró su sonrisa. Todos los días estuve intentando sostenerme, justamente por ella, porque es la persona que más me apoyó, siempre era la más emocionada, la más feliz cuando iba a competir”.

Un día después del sepelio hubo una mezcla de emociones. Con su entrenador revisaron el ranking mundial y confirmaron su clasificación al certamen húngaro.

Paula asistirá por tercera ocasión a la máxima competición de atletismo a nivel internacional, la primera en la categoría absoluta. Las anteriores fueron en la U18 y en la U20.

Una de las metas que siempre soñó cumplir ya no lo pudo compartir con su progenitora. Me quedé con esas ganas de contarle que efectivamente entré, pero bueno, sé que desde donde ella está, lo sabe y está muy feliz”.

A doña Martha le diagnosticaron un cáncer hace dos años. “Con las quimios se mantenía bien. Digamos que también nos dio el tiempo para reflexionar, para aceptar esta situación, para quizá acercarnos más a ella, resolver cosas que estaban por ahí, más bien estos últimos meses empezó a decaer porque ya dejaron de darle las quimios…”.

Su partida le dejó una gran enseñanza. Estas cosas te hacen ver lo que verdaderamente vale que es tener la presencia de la gente que amas. Desde que ella estaba mal creo que yo veía cada día como un regalo el tener cerca a cualquier miembro de la familia”.

En Budapest espera, al menos, acercarse a su mejor marca (1h30m34s). “Creo que es muy poco realista, por así decirlo, pensar en una marca para Juegos Olímpicos (1h29m20s)”.

Se estima que la prueba se desarrollará con una temperatura y humedad altas. “La humedad no me preocupa tanto, el calor si suele pesarme un poquito, pero las condiciones son para todos”.

Paula quiere ir en la mejor forma deportiva para hacer una buena carrera y dedicarla a su mamá. “Aunque este sea un escenario triste, siento una motivación extra que quizá nunca antes había sentido, confesó la marchista azuaya tras terminar el entrenamiento en el estadio Alejandro Serrano Aguilar.

Detalle

  • El Mundial, clasificatorio para París 2024, se realizará del 19 al 27 de agosto. El 20 km marcha mujeres se realizará el 20 de agosto a las 07:15 locales (01:15 del Ecuador).

Planificación

La muerte de su madre influyó en el estado anímico de Paula, pero Julio Chuqui destaca su predisposición a continuar con el trabajo para llegar en óptimas condiciones a Budapest.

Debido a su reciente participación en Brasil, esta semana realiza un trabajo de transición de ritmos. Desde el lunes siete de agosto retomará los trabajos intensos.

Chuqui le evaluará desde Rio Maior, Portugal. Allá viajará este sábado para acompañar a Glenda Morejón en el campamento que lleva a cabo junto con otros compatriotas como los azuayos Andrés Chocho y Daniel Pintado.