En el barrio El Vado se lleva a cabo la restauración de la Casa Rodríguez, una edificación vernácula que tiene unos 150 años de historia y es parte del Complejo Cultural del sector, que incluye cinco casonas patrimoniales: La Lira, La Tienda, Márquez, Rodríguez y Donoso.
La Casa Rodríguez guarda un valor histórico tangible e intangible, vinculado a los hornos comunitarios y los huertos tradicionales cuencanos. El objetivo es recuperar y adaptar este espacio para darle un nuevo uso, indicó Xavier Aguirre, director de Áreas Históricas y Patrimoniales.
La obra tiene un avance del 60% en la restauración, proceso que inició en la anterior Administración Municipal. Este trabajo tiene dos etapas. La primera contempla la recuperación de la Casa Rodríguez con una inversión de 200 mil dólares.
En una segunda fase se cumplirá la restauración de la Casa Donoso, con un presupuesto de 500 mil dólares. Esta está programada para el próximo año.
“El mayor enfoque que se ha dado en este predio (Casa Rodríguez) es la recuperación de vestigios arqueológicos. Hemos encontrado pisos antiguos que son parte de la historia de las casas patrimoniales y también canales y sistemas de agua, que atravesaron este barrio y que sirvieron para las actividades artesanales”, explicó Aguirre durante un recorrido que efectuó ayer.
Agregó que es fundamental rescatar la materialidad original de cada uno de los espacios, dado su alto valor cultural para la vinculación con la comunidad.
Labores
La Casa Rodríguez aparenta ser pequeña en el ingreso, pero se va abriendo poco a poco en su interior. En la recuperación laboran obreros y técnicos y la finalización está prevista para inicios de 2024.
Fausto Cardoso, docente de Arquitectura de la Universidad de Cuenca, afirmó que El Vado guarda parte de la historia hidráulica de la ciudad, es decir, del manejo del agua en Cuenca que antiguamente era surcada por canales que movían molinos, que era la forma de producción de alimentos.
“Es importante el trabajo de prospección arqueológica que se está haciendo, para entender el sitio y tomar las mejores decisiones de cómo manejarlo, no solo es lo arqueológico, sino que es un lugar social-comunitario y también tiene una memoria colonial”, aseguró el experto.
El Vado es el barrio más antiguo de Cuenca, lo atraviesa la calle La Condamine, donde se preservan oficios y artesanías, historias y viviendas de antaño que han sido recuperadas en los últimos años por la Municipalidad, entre ellas, la Casa de La lira, la Casa Tienda y la Casa Márquez.
‘Team Minga’
Manuel Vallejo, morador de El Vado, recordó que en 2019 se desarrolló el proyecto ‘Team Minga’ en conjunto con la Universidad de Cuenca, con el propósito de recuperar los bienes patrimoniales para conservar y rescatar los oficios y a su vez promover actividades culturales y fomentar el turismo en vinculación con la comunidad.
“El ‘Team Minga’ se ha trabajado desde hace cuatro años y pedimos que se aplique. Lo que buscamos los moradores del sector es que se prioricen las actividades culturales y que llamen al turismo, pero consensuando con la colectividad”, señaló.
Gabriela García, directora del proyecto, explicó que el ‘Team Minga’ es un trabajo de investigación participativa que busca transformar la forma de gobernanza, es decir, involucrar a las autoridades y escuchar a las comunidades para potenciar el uso de bienes y aportar a la gestión del patrimonio cultural.
Asimismo, Vallejo hizo un llamado a las autoridades para que se dé mantenimiento a los bienes patrimoniales recuperados. “La Casa de La Lira ya presenta deterioro en sus puertas”, indicó. (PNH)-(I)
DATOS
- La Cruz del Vado es uno de los íconos del barrio y símbolo de la identidad cultural y religiosa de sus moradores.
- En el sector se conservan oficios como la fabricación de instrumentos musicales andinos, orfebrería, panaderías, barberías y tejido de sombreros de paja toquilla
