Réquiem por el Yasuní  

CON SABOR A MORALEJA Bridget Gibbs Andrade

Si pensamos que dejar de extraer petróleo en el ITT va a tener alguna incidencia en el cambio climático, estamos errados. El efecto ambiental es casi nulo en un país como el nuestro. Las naciones que sí influyen sobre el cambio climático, las que más contaminan, no comprenden por qué sacrificamos un ingreso primordial para nosotros. Entretanto, estas terminarán vendiéndonos el crudo que dejaremos de producir. Es una estupidez dejar de extraer petróleo, pero seguir consumiéndolo. 

No basta con gritar ¡viva la biodiversidad! Se debe estudiar a fondo la realidad. Gracias a que ganó el SÍ en la Consulta, el Estado dejará de recibir 1500 millones USD anuales e insistirá en la explotación minera que tiene un impacto ambiental más agresivo que la petrolera.

La Consulta por el Yasuní debió hacerse hace diez años cuando se adulteraron mapas para acelerar la explotación del ITT. En el 2008, el prófugo propuso a la Comunidad Internacional que entregase 3.600 millones USD para mantener el petróleo bajo tierra. Cinco años más tarde consideró que fracasó la propuesta por no haber recaudado los ingresos esperados. “El mundo nos ha fallado”, dijo, y firmó el decreto que autorizó la explotación de crudo.

Por otro lado, las comunidades cercanas al ITT están a favor de la extracción de petróleo. Es lógico. Trabajan ahí. Sin sus salarios, esta gente traficará con especies protegidas, con madera y se involucrará en la minería ilegal. Si no se explotaba el ITT y el autócrata cumplía con su deber de dar paso a una Consulta, esa zona permanecía inexplorada como siempre debió estar. Pero una vez que ya se hizo el daño y que las petroleras ya están operando, votamos para que desmonten todo el andamiaje que costará unos 500 millones USD porque se nos ocurrió apoyar al cambio climático. De un sólo tajo le arrebatamos un ingreso sustancial al Estado, y al mismo tiempo, le generamos un nuevo gasto. Una sinrazón.

Fue muy bajo usar imágenes de derrames y tragedias de desastres ambientales durante la campaña que no correspondían al bloque ITT. La carretera que conduce a esta zona quedará desierta, sin vigilancia. Pregunto a los que votaron por el Sí: ¿ustedes van a proteger y cuidar al Yasuní cuando el Estado salga de ahí y quede la carretera expedita para que las mafias hagan de las suyas? Este es mi réquiem por el Yasuní. (O)