¿Qué color tiene la gestación?, se preguntó Juliana Andrade, una gestora cultural que desde la niñez quiso entender qué pasaba en el cuerpo de una mujer embarazada. Aunque para muchos es un proceso natural, que ha estado allí, a vista de todos, para Juliana era un tema muy personal que partía de la curiosidad.
Fue entonces que las consultas la llevaron a tratar de responderlas a través del arte. Y ¿si pedía a un grupo de artistas que le ayudasen a interpretar lo que sentían las mujeres en su periodo de gestación?
Esa pregunta fue el puntapié que necesitaba para desarrollar lo que sería “El color antes de la luz”, una exposición de las respuestas que obtuvieron diez artistas: Juan Carlos García, Claudia Fuentes, Gabriel Zamora, Antonia Aguirre, Janneth Méndez, Gabriela Padrón, Antonio Jaramillo, Emma Willie, David Padrón y Liara Barco.
Para el desarrollo de la propuesta que había planteado Andrade, se escogieron nueve mujeres de distintas edades y contextos sociales, y se establecieron tres aristas artísticas: la fotografía analógica, la obra pictórica y la literatura.
En el caso de la primera arista, la idea fue fotografiar a las mujeres en su espacio de vida. La segunda tomó forma una vez que se asignó a los artistas una mujer embarazada para que la entrevisten y, con esa información, creen una obra pictórica.
“Cada artista tuvo la labor de interpretar la historia, las experiencias, para materializarlas con un color por medio de una obra pictórica. ¿Por qué este color? Porque quisimos que ellas expresen su propia historia del embarazo a través de un color”, explicó Andrade a diario El Mercurio.
La última arista estuvo a cargo de David Padrón, quien escribió micro textos basados en lo narrado por las mujeres embarazadas.
Los tres trabajos se conjugaron para crear “El color antes de la luz”, la muestra que se inauguró ayer, en el segundo piso de la Antigua Escuela Central.
Un proceso gratificante
Si bien el trabajo final ha dejado grandes experiencias, lo que más ha gustado a los artistas es la conexión que se generó entre ellos y las mujeres embarazadas.
Escuchar sus historias, acercarse al proceso de gestación, adentrarse a un mundo que a veces es ajeno, trasladó a los artistas a un espacio que les permitió crear las obras.
“Yo tuve la oportunidad de entrevistar a una joven venezolana de 24 años. Y el color que ella nos dio fue el azul, y lo que yo percibí como que, el embarazo, de alguna forma, le daba como un tinte a las cosas buenas, a las cosas malas”, contó Juan Carlos García.
El artista llevó ese color a su obra que está acompañada por una fotografía de la joven y un texto corto de David Padrón.
Otra de las características de El color antes de la luz es su diversidad artística. Por las propias particularidades de los artistas, cada quien interpretó a su manera, tanto el color como el proceso de gestación.
Un ejemplo de esto lo vivió la artista Liara Barco, quien entrevistó a una mujer de 38 años, que estaba en su quinto embarazo. En la entrevista, Barco entendió que cada proceso de gestación es diferente.
“Fue conmovedor verla en un estado de consciencia absoluta de su embarazo, de lo que estaba viviendo. Ella sabía que podía tener más tiempo con su hijita, y sabía que le había hecho falta tener esa consciencia con sus otros hijos”, dijo Liara. Todas esas historias que gratificaron a los artistas, y que, de alguna manera respondieron la primera pregunta que se hizo Juliana Andrade, están plasmadas en las obras que estarán expuestas hasta este 25 de septiembre. (I)