El portal especializado InsightCrime definió recientemente a Ecuador como la «Autopista de la cocaína hacia Estados Unidos y Europa», haciendo referencia al hecho de que más de un tercio de la producción de cocaína en Colombia llega a Ecuador y se transporta desde los puertos nacionales hacia los Estados Unidos y Europa.
Las traumáticas consecuencias las experimenta cada ecuatoriano al haber perdido la paz, viviendo con temor debido a la falta de protección por parte del Estado. Nadie está exento de un asalto, secuestro o sicariato. Para recuperar la tan anhelada paz, es esencial la unidad de todos los estamentos y la contribución de cada uno de nosotros para reducir la desigualdad y la pobreza, especialmente en zonas deprimidas como Esmeraldas y Guayas, que se han convertido en «caldo de cultivo» para la proliferación del tráfico de drogas.
Un aspecto no menos importante es participar en la lucha para reducir la demanda de narcóticos. El Informe Mundial sobre las Drogas 2022 de la Oficina de ONU señala que la legalización del cannabis aceleró el consumo diario y sus consecuencias nefastas para la salud. Además, detalla el aumento sin precedentes en la fabricación de cocaína, la expansión de las drogas sintéticas.
Según el Informe, alrededor de 284 millones de personas de entre 15 y 64 años consumieron drogas en todo el mundo en 2020, lo que representa un aumento del 26% con respecto a la década anterior.
En nuestro país, se evidencia un alto consumo de drogas entre jóvenes de los sectores urbanos y rurales. Según estudios realizados, 4 de cada 10 jóvenes consumen algún tipo de sustancia adictiva, sin contar el alcohol o tabaco, lo que constituye un elevado porcentaje. La edad promedio de inicio del consumo de estupefacientes es entre los 11 y 18 años.
Las principales causas que llevan a estos jóvenes a consumir drogas incluyen la disfunción familiar, que provoca la falta de apoyo afectivo, las influencias del entorno en el que se desenvuelven y el desconocimiento de los efectos que las drogas causan en su salud y relaciones sociales. Se identificó que la marihuana es la droga más consumida, seguida del alcohol e inhalantes. ¿Qué estamos esperando para unirnos al objetivo de reducir la drogadicción? (O)