Existen dos fuentes que coinciden. En la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (ARCSA) y en el Servicio integral del hospital Bicentenario, de la Alcaldía de Guayaquil, ya existen informes alarmantes sobre casos sospechosos del consumo de la peligrosa droga conocida como fentanilo.
En el área de narcóticos de la Policía Nacional también se maneja una investigación bajo reserva sobre los riesgos de la presencia de esta sustancia en el país. En Guayaquil, por ejemplo, se han registrado casos de pacientes con síntomas relacionados al fentanilo y que han sido atendidos bajo el registro de consumidores de drogas.
El fentanilo, una sustancia que ha sido catalogada como ‘droga zombie’, es considerado un opioide (grupo de medicamentos analgésicos) sintético.
¿Por qué es tan peligroso?
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), de las primeras investigaciones se desprende que existen dos tipos de fentanilo: el farmacéutico y el fabricado ilícitamente. Ambos son considerados una droga altamente peligrosa porque puede causar muerte por sobredosis. Dos miligramos puede ser una dosis letal.
El Municipio de Guayaquil emitió un comunicado anunciando que el área de salud trabaja en investigaciones para determinar en qué puntos se podría estar consumiendo. Juan Carlos González, de Salud del Municipio del Puerto Principal, confirmó que hay sospechas de que el fentanilo está siendo usado por jóvenes y que están siendo mezcladas con otro tipo de drogas.
“Hemos registrado casos de pacientes consumidores de la droga conocida como ‘hache’ con síntomas relacionados con el fentanilo. La ‘hache’ se elabora con heroína, cemento, pintura y otros materiales”, explica el galeno. La Alcaldía alertó que la ‘hache’ también tendría porcentajes de fentanilo, pero sin que se logre determinar en qué porcentaje.
La Alcaldía del Puerto Principal ha comenzado a realizar trabajos en territorio. Especialmente en las zonas más peligrosas y de alto consumo. También se impulsa un plan articulado con otras entidades por la alta peligrosidad que representa esta sustancia.
Se inició las indagaciones porque las autoridades han alertado que ha comenzado a circular en plataformas digitales como Facebook las ofertas de ampollas y parches. Los productos se venden entre USD 5 y USD 170 por parche.
En el Hospital Bicentenario de Guayaquil hay cuatro pacientes cuyas historias clínicas están en reserva y tienen un seguimiento especial para conocer la evolución. Desde esta casa de salud ya se advierte porque son efectos letales.
De acuerdo con la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), una dosis de fentanilo que cabe en la punta de un lápiz puede matar a una persona. De hecho, entre 150 y 250 personas mueren cada día por sobredosis relacionadas con opioides sintéticos como el fentanilo en Estados Unidos.
Campaña preventiva sobre los riesgos
El Ministerio de Salud Pública ha emprendido una campaña en los centros médicos donde se atiende a los consumidores de drogas en el país. Mediante charlas informativas se ha informado que el fentanilo es una droga utilizada como anestesia para operar, pero que también al mezclar con otras sustancias puede causar un efecto muy adictivo.
Los médicos del Ministerio alertan que los consumidores de este tipo de sustancias pueden llegar a perder el sentido de las cosas, comienzan a tener problemas musculares que los hace encorvarse y les da el aspecto de zombis.
Además, hay un daño interno más grave, como problemas hepáticos, cirrosis, paro cardiorrespiratorio y estado de coma. Incluso puede causar la muerte.
Está previsto que en las próximas semanas comience una campaña educativa en los colegios informando los riesgos que hay de consumir el fentanilo. Esta empezará en Guayaquil y luego se extenderá a otras ciudades como Quito, Manabí y Esmeraldas, donde se ha mapeado un alto consumo de drogas.
DATO
El fentanilo, según los informes de agencias de salud y de investigación de los Estados Unidos, es 50 veces más fuerte que la heroína y hasta 100 veces más fuerte que la morfina.