El grave estiaje que vive la ciudad ha provocado desabastecimiento del servicio de agua potable. Los 40.000 usuarios del Proyecto Nero son los primeros que padecen racionamientos que superan las 12 horas al día.
Desde hace 20 años no se había registrado un descenso similar del caudal del agua que llega a la planta potabilizadora de Nero. Esto, debido a la falta de lluvias, recordó Luis Quinde, presidente de la Junta Administradora de Agua Potable Proyecto Nero.
De esta forma, el caudal bajó a los 43 litros por segundo, a diferencia de los 72 litros habituales. Por esta razón, los ocho tanques de reserva están vacíos, reveló Quinde. Esta situación ha empeorado desde hace 15 días.
Hasta ayer, contabilizaron 34 días sin lluvia en la zona, algo que ha llevado al directivo a tomar acciones contundentes como sancionar a los usuarios que hacen mal uso del líquido vital. La sanción es de 25 dólares y se regula la cantidad de agua que llega a los domicilios de quienes no cumplen con el uso adecuado del agua.
Por ahora, el Cuerpo de Bomberos de Cuenca apoya con el abastecimiento del líquido a las zonas más necesitadas a través de tanqueros. Los servidores de la casaca roja recorren puntos de El Valle, Turi y Baños.
Pérdidas
El estiaje representa un 40 % de pérdidas económicas para el Proyecto Nero, señaló el presidente Quinde. Con esto se dificulta pagar al personal y comprar químicos requeridos para potabilizar el agua.
Normalmente recaudan 47.000 dólares mensuales y ahora, apenas esperan llegar a entre 28.000 y 30.000 dólares.
Esta reducción les privará o por lo menos aplazará la construcción de uno de los cuatro nuevos tanques de reserva que habían proyectado para este año. Esta infraestructura y otros arreglos bordean los 650.000 dólares.
Preocupación
Mientras tanto, existe preocupación entre los habitantes. Por ejemplo, en el barrio La Cuadra. Aquí, la familia Sarmiento Peralta no recuerdan un estiaje tan largo. “Máximo hasta las 14:00 tenemos agua”, comentó Mariana Peralta.
Ella se abastece con el líquido para solventar las necesidades de su familia durante la tarde y la noche.
Lo mismo comentó Manuel Cajamarca, del barrio Señor del Cautivo, quien tampoco recuerda una sequía similar.
“Desde que tenía 16 años acudía las mingas en Nero, usamos el agua y no había pasado algo similar nunca” recordó. También acumula agua para tener las reservas necesarias.
Captación
Este sistema de agua cuenta con seis puntos de captación desde donde se conduce el agua cruda hasta la Planta de Nero. El principal es Chanchán, el segundo Guagua Chanchán y los cuatro restantes son denominadas captaciones 1, 2, 3 y 4.
La infraestructura de la captación y de las tuberías para transportar el agua cruda están en buenas condiciones debido al mantenimiento correctivo y preventivo, aseguró Quinde.
Alternativas
Para Quinde, urge buscar nuevas fuentes de agua. Por ejemplo, en el caso de Nero, a más de las captaciones actuales hay alternativas en la zona media de captación actual. De esta forma será posible garantizar el insumo para los actuales y los nuevos usuarios.
Por otra parte, este año se revisó la tarifa y subió 50 centavos. Es decir, antes el básico era de 2,50 dólares y ahora de 3 dólares. Sin embargo, sigue siendo económico, indicó Quinde.
Por el momento no reciben reclamos de los usuarios, no obstante, reconocen que se deben tomar acciones para evitar cortes más prolongados. (FCS)-(I)
Nueva planta de agua
Desde el Proyecto Nero ya se ha solicitado, de manera oficial, al Ministerio del Ambiente, Agua, y Transición Ecológica la posibilidad de ampliar la potabilización de 72 litros por segundo a 153 litros por segundo.
De manera preliminar, conocen que la respuesta será positiva, de hecho, Óscar Rojas, viceministro de esta cartera de Estado ha anunciado una visita en los próximos días.
Esta ampliación obedece a proyecciones en las que se estima que en 30 años servirán a 18.000 familias.
Los estudios de prefactibilidad los ejecutan estudiantes de maestría de la Universidad del Azuay y se espera tener resultados en marzo de 2024.
Dos meses posteriores tendrán el estudio de factibilidad con lo que podrán contar con los diseños de los puntos de captación, la nueva línea de conducción y la nueva planta de tratamiento. Estiman que la nueva planta podría costar 3 millones de dólares. (I)