Incluso ¿por qué?
Expliquemos. En las nuevas formas de organización social, de las miradas y de las urgencias, hay muchos para qué y por qué sin respuesta. Presencia de una realidad vertiginosa, a la que no le tienen compasión la reflexión, el pensar, el entender, el buscar paz.
El mayor bien del ser humano es la libertad como un concepto cada vez más amplio, en la actualidad, aún más. Mucho más. No se trata de una dinámica política, al contrario, tiene una profunda connotación social alejada de la miseria, del reclutamiento de la dependencia, del hambre que anula y el vicio que limita. Es así que se convierte en un camino hacia la dignidad humana. Hacia la plenitud de la vida. Con un profundo sentido humano. Como una clara destreza por lo humano. Como una fuerza que motiva lo humano.
La libertad permite paz. Ambas, son la base para la posibilidad del progreso y esperanzador futuro. Es lo que consiente abrazar el camino sin coerción y sin miedo. Sin explotación, esclavitud, violencia o muerte. Admite la alegría y el compartir. El acompañar para caminar. El traducir la desventura en la más alta esperanza. El dejar la herencia de un mundo más decente.
Entonces para qué alcanzar la libertad y por qué hablar de ella. Precisamente, porque se debe cumplir nuestro deber. Buscar lo justo y correcto, si se quiere, alcanzar la felicidad humana, y ella, no consiste en artificiosos artilugios, sino en ser fieles al deber. Al protagonismo del obrar correcto. En las tareas. En las acciones. En la ausencia de omisiones. En las responsabilidades que impone el caminar en contra de tiempos peligrosos y confusos. En el rechazo a lo incierto que oscurece.
No cabe el desapasionamiento ni la frialdad. Todo está conectado. No tiene sentido el aislamiento. El mundo, la sociedad actual y la naturaleza, nos requiere concentrados. Sí. Pues, si algo se quiere, implica la disposición a la acción por el bienestar. No puede ocultarse la responsabilidad. El tiempo nos requiere. Las urgencias nos llaman. Yo diría que la humanidad busca a seres humanos más profundos. (O)