Cuenca.- Dos casos consecutivos de justicia por mano propia ocurrieron esta semana en la ciudad de Cuenca. La indignación de ciudadanos -ante la inseguridad- ha llevado a la quema de dos motocicletas que habrían sido utilizadas por presuntos delincuentes, en diferentes sectores de la urbe.
El primer caso sucedió la noche del miércoles 18 de octubre de 2023, en la vía a la parroquia Paccha. De acuerdo con testigos, dos ocupantes de una motocicleta interceptaron a una transeúnte y le arrebataron el teléfono celular y otras pertenencias.
Durante el robo hubo un forcejeo que provocó que la motocicleta de los asaltantes pierda la estabilidad y caiga sobre la calzada. Los dos ocupantes de la motocicleta tuvieron que escapar a pie, puesto que algunos habitantes de la zona dieron las primeras ayudas a la víctima del robo.
El hecho causó alarma en la zona, lo que permitió la captura de uno de los presuntos delincuentes, mientras el otro logró fugar.
El capturado fue puesto a ordenes de la Policía Nacional y trasladado momentáneamente a la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Ucubamba. Esto mientras una multitud optó por quemar la motocicleta de los implicados, la cual quedó sobre la calzada.
Los habitantes de la zona expresaron su indignación y en grupo acudieron hacia la UPC de Ucubamba con la intensión de castigar a quien fue capturado. Los ciudadanos expresaron que desconfían del sistema de justicia y que temían que pocas horas después el acusado quede en libertad.
Mientras tanto, la noche del último jueves 19 de octubre, se produjo un nuevo hecho que alarmó a los habitantes de la parroquia Totoracocha, en el sector Retamas Bajas.
Según testigos, delincuentes ingresaron a un local y habitantes de la zona se percataron del delito por lo que activaron el alarma comunitaria. Esto permitió que varios ciudadanos actúen contra la delincuencia. Los implicados en el delito lograron fugar pero dejaron abandonada la motocicleta en la que se movilizaban. La enardecida multitud optó por quemar la motocicleta como una muestra de justicia por mano propia.
Una ciudadana mencionó: “estamos cansados de la delincuencia, no es justo que se afecte a gente trabajadora que con tanto sacrificio se ganan el pan de cada día”.
Las autoridades señalan que, tomarse la justicia por mano propia es ilegal y podría traer consecuencias jurídicas. En Ecuador, la agresión física se sanciona con pena privativas de 30 días a 5 años y, en los casos de asesinato, de 22 a 26 años de prisión.
Sin embargo, la poca credibilidad en las entidades encargadas de la seguridad llevan a los ciudadanos a ejercer su propia defensa contra actos delictivos.
De su parte, la Policía Nacional señala que los capturados por la ciudadanía deben ser entregados a la autoridad competente, para el respectivo procedimiento de investigación. (I)