A diferencia del resto del país, solo en Cuenca la segunda nacionalidad extranjera con mayor cantidad de población es la estadounidense. Pero muchos no son ciudadanos pasivos y se activan para acciones positivas como mantener limpias las paredes de la ciudad.
Es así que un grupo de residentes se ha comprometido a exterminar rayones, manchas y textos ilegibles de las paredes del Centro Histórico. Este grupo se hace llamar ‘Keep Cuenca Beautiful’ (KCB) (Mantener hermosa a Cuenca) y se ha convertido en el ‘pincel’ que mantiene visible la belleza arquitectónica local.
En la actualidad, son cinco los miembros activos que cuidan las paredes, muros, pilares y cerramientos, principalmente, los cercanos a sus domicilios.
La idea no es enfrascarse en una guerra entre la gente de daña las paredes “es llegar a un acuerdo”, explica Mike Hardy, uno de los miembros más activos en la ciudad.
Mike vive en el centro de la ciudad. Él es un programador, ciclista y ejecutivo estadounidense, que se encarga de mantener su entorno “limpio de rayones”. A esta altura, ya reconoce a quienes las pintan por sus firmas.
Pero no elimina todo. Deja lo que considera arte, aquello con elementos artísticos, figuras que “embellecen el entorno”. Pero no las manchas, a esas no las perdona.
Lo que sí tiene claro, es no convertir las paredes de Cuenca en un campo de batalla que definan quien gana o quien pierde. Más bien siente la urgencia de entender qué les hace falta a quienes pintan y qué es lo que expresan.
Gracias a estos ‘enfrentamientos’, ha conseguido dialogar con ellos.
“¡Hey! Mike, ¿cómo va todo? Hoy salimos con los muchachos, ¿todo bien con KCB? Toparán para pintar” Fue uno de los graffitis que Mike debió limpiar pero que le hizo reflexionar sobre la importancia de escucharlos.
Creo que solo quieren ser vistos, comentó el estadounidense. No son una banda con armas, son una banda con pintura y no son violentos. Reconoce que no es posible limpiar todas las paredes de la ciudad, pero si quieren empujar a dejar “las etiquetas que afean el entorno y llevarlos a que hagan arte”.
“La única regla del grupo es limpiar aquello que afea… Y al que ‘grita’, se limpia, si vuelve a ‘gritar’, se pinta”. Es decir, aquellas formas ilegibles y que no tiene sentido como líneas y figuras deformes.
Otra meta que surgió en el camino es disponer de espacios libres en donde los grafiteros puedan plasmar sus ideas. Por el momento hay algunos como los puentes, la cerca del Complejo Cultural Pumapungo y otras ‘zonas francas’ a las que tienen acceso y conocen los creadores de estas figuras que, por lo general, se plasman cuando las sombra se apoderan de las calles. (FCS)-(I)
La pintura es donada
Ayudar a mantener una “Cuenca hermosa”, es posible a través de donaciones que reciben los miembros de KBC.
Pero no lo hacen directamente. Existe un convenio con la tienda de pintura ‘Casa Color’ a la que se deposita a la cuenta corriente – 401500200-2 a nombre de John Saavedra en el Banco Bolivariano. El número de cédula es 0101880557.
Lo único que se pide es detallar para que la donación es para KCB. La pintura que usan cuesta 20 dólares por galón. Hasta ahora los residentes han pagando el este costo de sus bolsillos.
Por transparencia, los ciudadanos pueden constatar el uso de sus donaciones. (I)
CIFRA
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son los miembros más activos de ‘Keep Cuenca Beautiful’ (KCB) que limpian las paredes de la ciudad.
DATO
Invitan a ciudadanos que tenga problemas en sus casas con rayones, manchas y letras ilegibles a contactarse con ellos a través de las redes sociales para ayudar.