La hacienda Nicaragua

 Jorge L. Durán F.

El ejercicio del poder ¿desquicia? ¿En dictadura, peor?

Mientras por estos lares el presidente Daniel Noboa comienza alborotado su gestión, nacionalizando personajes para que asuman un ministerio; designando como ministro de Defensa a un tercer dan en casi todas las artes marciales, experto en seguridad privada, ante el cual los militares deberán cuadrarse; o decide, literalmente hablando, enviarle a la guerra a la vicepresidente Verónica Abad, Nicaragua cada vez más es hacienda única de la pareja Ortega-Murillo.

A esta pareja dictatorial, también con adeptos en el Ecuador, el totalitarismo les conduce a las más aberrantes alucinaciones, cuando no a decisiones irrazonables, que hasta llevan a dudar de si pertenecen al género humano o provienen de la incubación del mal en su máxima expresión.

Aquel matrimonio nefando ha prohibido el regreso al país de Sheynnis Palacios y de su madre Karen Celebertti.

Los doberman bajo su mando allanaron la vivienda de las dos mujeres y retuvieron al esposo, Martín Argüello, según denuncian periodistas nicaragüenses que hacen su trabajo en otros países.

¿Cuál es el delito?

Shennis fue coronada Miss Universo 2023, convirtiéndose en la primera centroamericana en ganar este concurso. Su madre es dueña de la franquicia de Miss Nicaragua.

¿De qué las acusan?

El triunfo de Shennis desató masivas celebraciones de los nicaragüenses en las calles. Eso reavivó las pesadillas de la pareja dictatorial. Cree, pues, que hay “el aprovechamiento grosero, y la tosca y malvada comunicación terrorista, que pretende convertir un lindo y merecido momento de orgullo y celebración, en golpismo destructivo”.

La masiva celebración le hizo recordar a la pareja las marchas efectuadas hace cinco años y que estuvieron a punto de acabar con su dictadura.

En esas protestas, Shennis fue protagonista. Ahora se difunden en las redes sociales su fotografía levantando una bandera de Nicaragua.

Esto desató la ira de Ortega y de su “reina”; pues, para los dictadores, hasta el zumbido de las moscas los fastidia. Entontecidos, embrutecidos por el poder total. Han convertido a Nicaragua en su hacienda, cuando, por lo que hacen, deberían estar en los cráteres de sus volcanes. (O)