Jerusalén.- El Ejército israelí atacó con artillería varias posiciones del sur de Líbano tras la infiltración en su territorio de dos drones cargados con explosivos que cruzaron la frontera desde el país árabe, donde se vive el mayor pico de tensión e intercambio de fuego desde 2006.
«Tras las sirenas que sonaron en el norte de Israel debido a la infiltración de un dron hostil, el sistema de defensa aéreo de Israel interceptó un avión no tripulado que cruzó desde Líbano», informó el Ejército israelí en un comunicado.
Un segundo dron fue identificado y cayó en Margaliot, en el norte de Israel, agregó.
El Ejército israelí no atribuyó el lanzamiento de los drones a ningún grupo en concreto, ya que el sur de Líbano está controlado ampliamente por la milicia chií Hizbulá, pero también operan grupos palestinos vinculados a Hamás o la Yihad Islámica, que también atacan hacia Israel, aunque con menos capacidad.
Posteriormente, Israel informó de una serie de ataques desde el Líbano a los que respondió con artillería.
En este caso responsabilizó expresamente a Hizbulá, lanzando un ataque con aviones de combate contra objetivos como posiciones y puestos de lanzamiento de proyectiles de grupo chií libanés.
El Ejército israelí atacó además a «dos sospechosos en el área de un puesto de lanzamiento de Hizbulá», según un comunicado castrense.
Ayer el Ejército israelí sí admitió haber atacado posiciones de Hizbulá tras identificar a varios miembros del grupo que «operaban» cerca de la frontera, en el área de Zarit; además de lanzar por primera vez panfletos en el sur de Líbano como advertencia a la población de que no colabore con el grupo chií.
La frontera entre Israel y Líbano vive su mayor tensión desde la guerra que tropas israelíes y Hizbulá libraron en 2006, con un intercambio de fuego que comenzó el pasado 8 de octubre, al día siguiente de que estallara la guerra entre Israel y el grupo islamista Hamás en la Franja de Gaza.
Hizbulá y milicias palestinas en el sur de Líbano han lanzado cohetes, drones y misiles antitanque, a lo que Israel, que ha desplegado más de 200.000 soldados en su frontera norte, ha respondido con intensos ataques por aire y con artillería.
Desde el comienzo de las hostilidades en la zona, se han registrado más de 140 muertos: 11 en Israel -7 soldados y 4 civiles- y al menos 132 en el Líbano, incluyendo unos 100 miembros de Hizbulá, 12 integrantes de milicias palestinas, un soldado y 19 civiles -entre ellos tres periodistas y tres niños-.
La violencia también ha provocado el desplazamiento de miles de habitantes: unas 60.000 personas han sido evacuadas de las comunidades del norte de Israel y más de 55.000 han huido del sur de Líbano. EFE