En Ecuador, en el nuevo año que está por comenzar, podemos proyectar algunas tendencias de lo que podría pasar en lo económico, social y político.
En lo económico, a pesar de los esfuerzos que puedan realizarse por el Gobierno central, persistirá la crisis fiscal; lo que se expresará en la pervivencia de la insuficiencia de recursos para financiar, de manera adecuada y oportuna, las actividades que son parte de la gestión gubernamental. Coetáneamente la reactivación del aparato productivo, que supondría una mayor inversión económica nacional o extranjera, no ocurrirá en los términos esperados por el Gobierno y otros actores económicos.
La posibilidad de que el Gobierno recurra a medidas económicas impopulares para cubrir el abultado déficit fiscal, como la eliminación de subsidios, podría conllevar la presencia de conflictos y protestas sociales; aunque el Gobierno buscaría de ser mesurado en este tema debido a las pretensiones de reelección que tendría el Presidente Noboa.
En el plano social, precisamente por la escases de recursos económicos fiscales, es previsible que persistan los problemas en la atención de los servicios públicos de salud, educación, vivienda, vialidad, etc. ; amén de la falta de cumplimiento de las principales ofertas electorales, realizadas por el Presidente en su campaña, especialmente en temas como el incremento del empleo, el libre acceso a las Universidades, el aumento de la pensión jubilar básica a 460 dólares, y la reducción significativa de la criminalidad e inseguridad. No obstante, y por motivos electorales, el Gobierno trataría de compensar estos incumplimientos con algunos programas sociales básicamente asistencialistas y clientelares.
En lo político, 2024 va a ser un año muy electoral; esto debido la consulta popular anunciada por el Gobierno; y, a las definiciones electorales que se darán hasta e septiembre, de cara a las elecciones presidenciales y legislativas de febrero de 2025; lo que llevará a una campaña electoral anticipada en los últimos meses del año. También es muy probable que, debido a divergencias ideológicas y por motivos electorales, se asista en los próximos meses a una ruptura del acuerdo parlamentario entre la “Revolución Ciudadana”, el Gobierno y el PSC. (O)