El Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE) verifica las denuncias del uso de pirotecnia sonora en la isla Santa Cruz, la segunda más grande del archipiélago de Galápagos, catalogado por la Unesco como Patrimonio Natural de la Humanidad.
En un comunicado, apuntó que ante las denuncias ciudadanas presentadas en redes sociales sobre el aparente uso de pirotecnia sonora en la sala Santa Cruz, «está tomando las medidas necesarias ante lo ocurrido, con el fin de salvaguardar el equilibrio ambiental de este ecosistema único».
En este contexto, se está llevando a cabo una investigación en coordinación con los entes competentes a fin de verificar el cumplimiento de una resolución que prohíbe de manera expresa el ingreso comercio, distribución y uso de fuegos artificiales o pirotécnicos a las Islas Galápagos, «con excepción de aquellos que producen fenómenos luminosos de forma insonora«
Evaluación de afectaciones al Ecosistema
Asimismo, se está realizando un seguimiento en el sitio con personal técnico para evaluar las eventuales afectaciones al ecosistema, en particular a la vida silvestre, indicó el ministerio que este martes continúa con las investigaciones.
«La colaboración ciudadana es fundamental para proteger este entorno único. Se exhorta a la población a respetar las regulaciones establecidas y a contribuir activamente a la preservación de la biodiversidad y belleza natural de Galápagos», apuntó en el escrito.
El archipiélago de Galápagos, declarado en 1978 como patrimonio natural de la humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), y poseedor de una biodiversidad única en el mundo, está situado a unos mil kilómetros de las costas continentales ecuatorianas. EFE