El italiano Jannik Sinner (4) no celebró efusivamente su victoria frente al serbio Novak Djokovic (1) en las semifinales del Abierto de Australia porque a pesar de que «significa mucho ganarle, el torneo todavía no se ha acabado».
«Yo siento esas emociones que uno no puede controlar. Claro que significa mucho para mí, pero, por otro lado, el torneo todavía no se ha acabado. El domingo es la final, y la final siempre es diferente», comentó tras alcanzar su primera final en competición ‘slam’.
«En los primeros dos sets he visto que él no estaba golpeando la pelota como de costumbre. Tampoco se estaba moviendo bien y tampoco estaba tan concentrado como siempre le vemos», agregó Sinner tras convertirse en el primer tenista italiano, tanto en hombres como en mujeres, en alcanzar la final a orillas del Yarra.
«Vi aquel partido de Carlos (Alcaraz) y la verdad es que fue increíble. No sé que decir al respecto», afirmó después de que desvelaran que tanto él este viernes, como el murciano en la final de Wimbledon de 2023, habían roto una racha del balcánico de 2.195 días consecutivos sin perder en Melbourne y Londres, respectivamente.
«Creo que después de la temporada pasada, en particular el final del año, me dio la confianza para creer que podía conseguir buenos resultados en los Grand Slams. Pero luego tú tienes que demostrarlo. Hay mucha gente que habla, pero luego tu tienes que demostrar eso», concluyó un Sinner que se enfrentará en al final al alemán ALexander Zverev (6) o el ruso Daniil Medvedev (3).