En una muestra más de astucia y cinismo, y anticipándose a los hechos, el dictador venezolano ha declarado que los acuerdos de Barbados, llevados a cabo desde principios del año pasado entre el chavismo y las fuerzas de oposición venezolanas, se encuentran “heridos de muerte”. Los acuerdos mencionados tenían como premisa, aceptada paladinamente por el gobierno de Maduro, el garantizar la realización de elecciones libres en Venezuela para el presente año 2024, en el que deben efectuarse nuevas elecciones presidenciales. El chavismo, utilizando las buenas y las malas artes, especialmente éstas últimas, controla todos los poderes desde hace 22 años.
Lo de la astucia y el cinismo se explican por sí solas, pues, mientras Maduro y sus cortesanos asistían a las reuniones de Barbados con su piel de ovejas y envolvían con ofertas democráticas, tanto a la oposición política de su pais como a los miembros de la comunidad internacional, lo único que hacían es quemar tiempo, mientras las reglas del juego ya estaban trazadas por ellos mismos. No permitirían jamás que María Corina Machado sea la candidata de la oposición, porque conocen perfectamente los resultados de las encuestas y la sola idea de que asuma la presidencia de Venezuela una persona de fuera de las filas chavistas, les provoca convulsiones incontenibles.
El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, bajo el control del chavismo, ha declarado la inhabilitación de Machado para ser candidata en las próximas elecciones y durante los próximos quince años, acusada, de manera grotesca y burda, de haber cometido actos de corrupción durante el interinazgo de Juan Guaido. Desde el 2002 hasta la fecha, se calcula que 1.400 líderes políticos venezolanos de la oposición han sido impedidos de participar en los procesos eleccionarios, ya sea a través de carcelazos o la aplicación de inmorales argucias legales. Maduro sabía de antemano cual iba a ser el curso de los famosos “acuerdos”, sabía que se trataba de una tramoya farandulesca, sin embargo continuó manejando el vergonzoso sainete, ¿por qué?, “bicos is nais, bicos is jan som, bicos is somting incredibol”. (O)
