Al menos 23 migrantes de Ecuador iban en la caravana de vehículos baleada e incinerada por un comando armado entre la noche del jueves y madrugada del último viernes, en el Municipio de Caborca, en Sonora, en México.

De acuerdo con datos de autoridades mexicanas, los atacantes estaban en carros militares.

Ocurrió cerca de Arizona, en la frontera de Estados Unidos (EE.UU).

Según información de servicios de emergencia de Sonora, hay varios muertos entre ellos, un niño, de unos cuatro años, de origen ecuatoriano.

También reportaron unos 12 heridos.

Algunos de los cadáveres terminaron calcinados dentro y fuera de los vehículos, por lo que las autoridades los trasladaron hasta centros forenses para su identificación.

Se desconoce su nacionalidad.

Matanza ocurrió en ruta a Arizona

Esta matanza se dio en un tramo del carretero entre Altar Sáric y Cerro Prieto, que es una ruta muy utilizada por migrantes que buscan llegar a Heroica Nogales e ir a Arizona para entregarse a las patrullas fronterizas de EE.UU.

De acuerdo con el testimonio de una migrante de Ecuador, quien es una de las sobrevivientes de este ataque armado y cuya identidad se mantiene en reserva, hay más ecuatorianos entre las víctimas.

Relató que la madre del pequeño que falleció fue transportada hasta el hospital General de Caborca, mientras que otros compatriotas, que terminaron con lesiones menores llegaron a un albergue en Altar, en Sonora.

Contó que en el carro en el que iba ella también estaban seis ecuatorianos más y que en el resto de vehículos, que eran unos siete, iban unos 17 compatriotas más.

No se conoce qué ocurrió con ellos. Ella vio al menos cuatro muertos en la escena.

Pedido a las autoridades

Roberto Tacuri, cuyo hermano también iba en la caravana, contó que tenían previsto llegar la madrugada del viernes a Sasabé, en Arizona, para caminar al muro fronterizo y entregarse a las patrullas fronterizas.

“No sabemos nada de él, solo una amiga que iba con él nos llamó desesperada a decirnos que llegaron unos hombres vestidos como militares y que pararon los carros donde iban, luego sacaron fusiles y dispararon…”, dijo.

“Nos dijo que cuando escucharon los balazos algunos que iban en los carros de más atrás lograron salirse y correr. Nos dijo que había señoras que llevaban niños por lo que se les hizo difícil huir y esconderse…”, señaló.

Tacuri pidió públicamente al Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana (MREMH) y al Ministerio del Interior que se contacte con autoridades mexicanas para conocer el estado de salud de los ecuatorianos.

Peligros de la frontera

Patricio Arízaga, miembro del colectivo Ecuatorianos en el Mundo, y quien reside en New York, advirtió que hay grupos criminales mexicanos que se pelean por captar a los migrantes que van hacia la frontera de EE.UU., en Arizona y Texas.

“De los testimonios que tenemos de los migrantes que logran llegar acá podemos deducir que los criminales ahora se pelean mucho más por los migrantes, los ven como una presa fácil para obtener dinero si no pagan, los matan…”, dijo.

Acotó: “vemos que esto ocurre en menor medida en la frontera de California y Nuevo México, por lo que ahora los migrantes son llevados por estos lugares, pero eso no significa que también se vayan a topar con estos criminales…”.