El bicicrosista azuayo Pedro Benalcázar, no descansa en su afán de estar entre los mejores a escala internacional. Y esto lo ha demostrado en la última Copa del Mundo, que se cumplió en Australia.
Allí, el representante cuencano disputó una de las finales en la categoría sub-23. Puso en práctica todos los consejos de su entrenador y coterráneo, Alfredo Campo, quien es uno de los candidatos a estar en los Juegos Olímpicos.
Benalcázar arribó a los 20 años, días atrás. Siente que su nivel va creciendo, pero no se imaginó que llegar entre los élite le ha costado mucho esfuerzo.
Tras su participación en el continente oceánico, se encuentra contento por el resultado, pero no satisfecho.
Las caídas en distintas fases de la Copa Mundo, evitaron que el pedalista tricolor llegue más lejos. No obstante, para el azuayo este tipo de infortunios le fortalecen y le brindan un aprendizaje para las siguientes competencias.
“Han sido unas semanas complicadas. En las primeras fechas que se disputaron en Nueva Zelanda, también me caí. Y en la última válida en suelo australiano, tuve otra caída, cuando estaba clasificando a las semifinales. Así esto, por suerte no tuve golpes fuertes y solo salí con raspones”, dijo el bicicrosista, durante su viaje de regreso a Estados Unidos.
Benalcázar hace su base de entrenamientos en suelo norteamericano. Allí, su preparación está a cargo del experimentado ciclista Alfredo Campo, quien es guía del joven deportista. Ambos comparten las prácticas en Rock Hill.
El azuayo, quien interviene en la sub-23, tendrá actividad en un par de semanas más en esta misma ciudad. Intervendrá en el Campeonato Americano.
“La final del pasado fin de semana salvó el viaje. Confirmé mi nivel y sé que estoy listo para dar pelea a los mejores. Los corredores de Australia y Nueva Zelanda son fuertes y su capacidad en competencia impresiona. Pero podemos estar a la par”, comentó el bicicrosista, de 20 años.
Retorno a los entrenamientos
Tras un largo de viaje de regreso a Estados Unidos, ‘Pedrito’, tendrá sesiones de descarga luego de dos semanas de intensa actividad. “Mis padres, Darwin Benalcázar y Manuela Guerrero, son pilares para que pueda seguir en este sueño”.
La meta del azuayo es llegar con ritmo al Campeonato Panamericano de BMX, que está programado para el próximo 13 de abril, en Bogotá, Colombia. Luego, se enfocará para tener opciones de medalla en el Campeonato Mundial de BMX.
Esta justa ecuménica se realizará entre el 12 y 18 de mayo, en Rock Hill, Estados Unidos.
“Siento que voy de menos a más. Cuesta tener ese ritmo, pero lo dejamos todo en la pista durante los entrenamientos, quien más queAlfredo para que me ayude” añadió Benalcázar.