Tiempos de oscuridad espiritual

Hernán Abad Rodas

El ejército israelí continúa con los bombardeos inmisericordes contra la Franja de Gaza, para “aniquilar” a Hamas, un movimiento al que cataloga a igual que Estados Unidos y la Unión Europea, como organización “terrorista”.

El conflicto entre Israel Y Hamás estallo el 7 de octubre 2023, cuando comandos islamitas mataron a cerca de 1.160 personas, la mayoría civiles. En represalia a este condenable hecho, Israel al mando de Netanyahu, ha asesinado alrededor de 31.000 Gazatíes; la gran mayoría también civiles, niños, mujeres, adultos mayores etc. aniquilando ciudades, hospitales, infraestructura básica, carreteras, escuelas etc. haciendo de la franja de Gaza un verdadero INFIERNO, donde reinan, el hambre, el llanto y el dolor.

Mientras occidente toca el violín; Gaza arde en una terrorífica guerra, las carreteras que unen varias de sus ciudades, Netanyahu y el ejército israelita las han convertido en cementerios improvisados; donde familiares de las víctimas civiles se han visto obligados a darles digna sepultura, otros, en llanto con picos y palas, escarban en las cunetas, en busca de sus seres queridos injustamente inmolados.

Sólo el silencio custodiará estas tumbas y la oscuridad del desierto no revelará el crimen cometido, las ramas de los arbustos cuyas raíces absorben los elementos del cuerpo, formando una cruz en cada víctima inocente, anunciarán a los supervivientes, el drama que representa la libertad, la justicia, la dignidad y la muerte.

Cuando termine este genocidio en Gaza, las futuras generaciones de palestinos, al caminar por estos cementerios clandestinos, lo harán muy despacio, para que el ruido de sus pasos no turbe el tranquilo sueño de sus compatriotas que prefirieron morir a vivir de rodillas.

Dios nos ha otorgado la inteligencia y el saber, pero hemos dejado que se apague la lámpara de la gracia divina, para vivir en la oscuridad del poder político y económico, de la codicia, la corrupción, la mentira y la injusticia.

Desde el principio de los tiempos hemos vivido en las sombras, y somos llevados como prisioneros de una celda a otra.

En estos tiempos de OSCURIDAD ESPIRITUAL en el que vive inmerso el mundo, es importante que busquemos las huellas de Jesús, Gandhi, Confucio y otros grandes maestros de la humanidad, para a través de ellas llegar a la paz, la libertad y a la justicia verdaderas.

El secreto del corazón se halla encerrado en la paz espiritual, y es sólo en ella en donde encontraremos nuestra verdadera alegría, mientras que la felicidad material sólo sirve para ocultar el profundo misterio de la vida. (O)