El candidato comunista a la presidencia rusa, Nikolái Jaritónov, el representante de Gente Nueva, Vladislav Davankov, y el ultranacionalista Leonid Slutski reconocieron este domingo la victoria del actual jefe del Kremlin con cerca del 88 % de los votos, a falta de los resultados definitivos.
«El pueblo (de Rusia) demostró como nunca a la comunidad internacional que se puede unirse y consolidarse», dijo Jaritónov en rueda de prensa tras conocerse los primeros resultados de los comicios presidenciales, que le dan el segundo lugar tras Putin con poco más del 4 % de los apoyos.
El político, de 75 años, agregó que espera cosechar un «resultado digno» tras el fin del escrutinio.
También el representante de Gente Nueva, Vladislav Davankov, a quien ha votado el 4 % de los rusos, reconoció la «indudable» victoria del actual líder ruso, quien podrá seguir en el Kremlin hasta al menos 2030.
El candidato al que llamaba a apoyar una parte de la oposición rusa agradeció a sus electores y reconoció que nunca antes había recibido tantos mensajes a través de redes sociales.
En el cuarto lugar tras cerca del 52 % de los votos escrutados queda ahora el ultranacionalista Leonid Slutski, que suma el 3,12 % de las papeletas.
También Slutski reconoció hoy la victoria de Putin y calificó su resultado de «histórico».
Putin, de 71 años, logró en estas elecciones su mayor victoria electoral desde que llegó al poder en el año 2000, pese a la guerra en Ucrania y las sanciones económicas occidentales.
Seguirá siendo presidente de este país durante otros seis años, tras los que podrá volver a presentarse a la reelección, ya que reformó en 2020 las cláusulas de la Constitución que le impedían seguir en el Kremlin.
La oposición al Kremlin no pudo concurrir en los comicios, ya que la Comisión Electoral Central (CEC) no registró a sus candidatos, que apoyaban la paz en Ucrania, por diferentes motivos técnicos o defectos de forma.
Miles de rusos críticos con el Kremlin acudieron a las 12 del mediodía del domingo a votar en masa en Rusia y en el extranjero en una muestra de repulsa coordinada por la oposición contra la política de Putin y la guerra en Ucrania. EFE