La Vida es siempre esperanza, positividad, esfuerzo, alegría, resiliencia, renovación, identidad, convivencia, sembrar para esperar cosecha. La cronología que llevamos sobre los hombros, nos muestra un sinnúmero de incidentes, experiencias, gobiernos, aciertos y desaciertos, errores y logros, aprendizajes y amnesias colectivas, ingenuidad y aceptación.
Nadie es perfecto, más cada día los ecuatorianos sufrimos por decepciones ocasionadas por nuestra pobre Democracia. Supuestos líderes (vinculados con la Política) que se alzan con la asistencia de la falacia y el engaño para apoderarse del poder, del manejo del Estado, de mentir al electorado con falsas expectativas de cambio para que no siga el pueblo soñando con la migración a costa de altísimos costos de riesgosos viajes por extraños lares en donde hasta se codean con la muerte y la miseria humana en diferentes facetas del coyoterismo.
De ofertas camufladas y de personajes vestidos de políticos (aunque hoy prima la informalidad), que se lanzan al manejo del Estado con un solo norte que es el mundo de la corrupción, de la sinvergüencería, de cuando son descubiertos …. niegan vínculos, relaciones y prácticas en donde brilla la ausencia de moral. Lo único que les diferencia de los de abajo, es que huyen, se burlan del País entero, son panas de los supuestos administradores de justicia, vigilan y controlan casi todo, aparecen como dueños de gigantescas fortunas, poseen estructuras de fortines con la tecnología de mafias internacionales que han provocado verdadero caos con dolor, crimen, hambre y muerte.
La Heroína que conduce la FGE, Dra. Diana Salazar, hace su trabajo como nadie en la historia del Ecuador y en época de invasión de mafias incrustadas en los más altos estamentos, con los intocables y propietarios de todo, de casi todo. Ojalá se respete su vida, su gestión y su férrica personalidad, para continuar con la guerra contra la delincuencia apoderada de NUESTRO PAÍS. (O)