El Gobierno ha emitido dos normativas para incentivar al sector de la construcción:
- La devolución del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y
- La reducción del IVA al 5 % para 18 materiales como concreto, varillas, áridos, conglomerantes y prefabricados de hormigón, entre otros.
Henry Astudillo, presidente de la Cámara de la Construcción de Cuenca, señaló que la medida que tendrá mayor impacto es la devolución del IVA, porque hará que el costo de la vivienda asociada a proyectos inmobiliarios baje entre 4 % y 5 %.
Mientras que, la reducción del IVA al 5 % beneficiará, sobre todo, a construcciones menores como ampliación o remodelación de viviendas que haga el ciudadano común.
Esta normativa, que se enmarca en la Ley para enfrentar el Conflicto Armado Interno, tendrá un costo fiscal de 289 millones de dólares.
“La reducción del IVA no tiene mayor impacto porque ya le están devolviendo el 100 % del impuesto. No importa si es del 5 %, 8 % o 15 %, es un tema de liquidez hasta que se realice el reembolso”, explicó.
Devolución del IVA en la construcción
Para acceder a la devolución del impuesto los proyectos inmobiliarios deben tener los permisos municipales y estar registrados en el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (MIDUVI), este último no aplica para los proyectos de vivienda propia, aunque no podrá superar dos viviendas al año.
En este sentido, Roberto Escandón, asesor tributario, considera que la medida puede también contribuir a formalizar al sector, por los permisos que exige la ley.
Acotó que desde el SRI debe haber celeridad en los procesos porque la devolución del IVA otorga liquidez, lo que es importante tener en el momento en el que se ejecuta la obra.
La Ley establece que esta debe realizarse en un plazo no mayor a 90 días, a través de notas de crédito.
La devolución del IVA rige desde febrero de 2024, con la emisión del reglamento de la Ley de Eficiencia Económica y Generación de Empleo.
Este señala que “las personas naturales y las sociedades que hubiesen pagado el IVA en las adquisiciones locales o importaciones de bienes y servicios para la construcción de proyectos inmobiliarios, tienen derecho a su devolución, siempre que el mismo no haya sido utilizado como crédito tributario o que no haya sido compensado ni reembolsado de cualquier otra forma”.
Expectativas disminuidas
Las expectativas para lograr una reactivación del sector de la construcción se vieron disminuidas, dado que el IVA del 5 % considera dos rubros, básicamente para obra gris y deja fuera materiales como estructuras de acero, de madera y elementos para los acabados de vivienda, que pasaron a estar gravados con el 15 % del IVA.
Leopoldo Ocampo, presidente de la Cámara de la Industria de la Construcción, afirmó que se debería ampliar el panorama.
“No alcanza para hablar de reactivación del sector. (Desde el 1 de abril) todo grava el 15 % en su cadena de valor. El SRI ha hecho un listado de materiales que sí ayuda, sin embargo, se debería ampliar porque si todo sube, las empresas no van a absorber estos 3 puntos porcentuales y habrá un incremento”, indicó en declaraciones a la prensa nacional.
El sector de la construcción registra una depresión. Actualmente representa alrededor del 6,2 % del PIB, cuando en 2015 se ubicaba en el 12 % del PIB.
Y es que, el 70 % de la actividad de la construcción depende de la obra pública, pero esta ha disminuido, lo que genera un estancamiento.
El 30 % restante corresponde a las actividades inmobiliarias privadas.
Ventas de viviendas en Cuenca
Las ventas de viviendas en los últimos años en Cuenca han bajado, se registra una reducción de un 20 % en reservas, según datos de la Cámara de la Construcción. “Hay más de 1.400 viviendas en oferta, el mercado se ha deprimido”, indicó Astudillo.
Añadió que, si bien este Gobierno no es el culpable de todo lo que ha sucedido en la industria de la construcción, sí puede ser responsable de no tomar decisiones tempranas en función de que sí habría mecanismos para reactivar el sector.
Entre las opciones mencionó que, si el Estado no puede invertir, debería analizar las concesiones o las alianzas público-privadas para ejecutar obras.
Además, enfocar los préstamos que otorga el Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (BIESS) en créditos hipotecarios para que los ciudadanos puedan adquirir una vivienda.
Y es que, a decir de Astudillo, también hace falta un impulso al crédito, tanto para los constructores como para los compradores de vivienda.
“Vemos que la liquidez de la banca es cada vez menor, no hay acceso a los créditos para la construcción, recurso que juega un papel importante«, aseguró.
Según los últimos datos del Censo de Población y Vivienda realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), en Azuay:
- 58,6 % tiene vivienda propia y totalmente pagada o la están pagando.
- 27 % tiene vivienda arrendada y
- 14,4 % residen en una vivienda prestada o por servicios.
Asimismo, los ecuatorianos viven mayoritariamente en casas (64,1 %), pero se observó un crecimiento en el número de departamentos que paso del 11,9 % en el 2010 al 21,1 % en 2022.
Materiales con 5% de IVA
- Acero de Refuerzo en Barras: Varilla laminada corrugada AS42 de ocho milímetros, 10 milímetros y 12 milímetros de diámetro.
- Áridos: Arcilla, arena, cal, caliza y pétreos.
- Concreto: Hormigón premezclado.
- Conglomerantes: cemento y sus derivados; residuo cementero.
- Materiales metálicos reciclables: Chatarra ferrosa.
- Morteros.
- Precursor de Cemento: Clinker, puzolana y yeso.
- Prefabricados de hormigón y arcilla: Adoquín, bloques, ladrillos y productos de hormigón prefabricado.
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