Este 22 de abril del 2024, en la Sala de la Corte Provincial de Pichincha se llevó a cabo la audiencia de apelación solicitada por Germán Cáceres, a la sentencia de 34 años y 8 meses por el delito de femicidio.
La pena se le impuso por el asesinato de su esposa, María Belén Bernal, el cual se perpetró en el interior de la Escuela Superior de Policía Alberto Enríquez Gallo, ubicada en el extremo norte de la ciudad de Quito.
Según informó Elizabeth Otavalo, madre de la víctima, la intención de la defensa del exuniformado es que se le modifique el delito por el que fue sentenciado, pasando de femicidio a asesinato, lo cual implicaría la reducción de la pena.
“La reparación jamás va a hacerse efectiva, ni todo el dinero del mundo me va a devolver a mi María Belén, lo único que queremos es que se sienten precedentes para nunca más nos sigan matando”, afirmó Otavalo.
Elizabeth Otavalo presenta objeción
La madre de la abogada asesinada también presentó su objeción a que el asesino confeso de su hija siga en la Cárcel 4 de Quito, en donde goza de privilegios como expolicía.
Como ha ocurrido en otras audiencias relacionadas con este caso, integrantes de organizaciones de defensa del derecho de las mujeres estuvieron presentes en los exteriores de la Corte, para manifestarse en contra del pedido de Cáceres.
Luego de escuchar a las partes procesales, la Sala Penal de la Corte Provincial de Justicia de Pichincha suspendió la audiencia de apelación. La fecha para anunciar la resolución se notificará en los próximos días.