En Ecuador el terrorismo es una amenaza para la paz y la seguridad del país y, por tanto, constituye un problema que afecta a toda la sociedad sin distinción de grupos de izquierda o derecha, ni de pobres o ricos. El terrorismo ha avanzando tanto a tal extremo que el Presidente Daniel Noboa hubo de declarar la guerra interna y disponer que las fuerzas armadas conjuntamente con la policía nacional proceda al control de éste azote para el pueblo ecuatoriano ya que los terroristas y los narcotraficantes están unidos para provocar la ansiedad basado en la acción violenta repetida por parte de varios individuos o grupos de personas que, por razones ideológicas, motivos políticos o delictivos, siembran el pánico, la angustia, la muerte, el resentimiento y el odio, dejando detrás de ellos destrucción, asesinatos, secuestros, pobreza, huérfanos y familias afectadas por la pérdida de familiares asesinados con crueldad por grupos de pandillas que actúan bajo el amparo de un sistema de justicia cómplice de jueces y fiscales venales, que bajo la influencia de coimas dejan libres a estos delincuentes que siguen gozando de libertad y de impunidad. Los ecuatorianos debemos mancomunar esfuerzos a nivel local, nacional, bilateral, regional, birregional para hacer frente a las diversas manifestaciones del terrorismo, la lucha debe ser común, y dejar a un lado la insensatez para esperar que en un tiempo demasiado corto se elimine el terrorismo y la delincuencia sin reflexionar que aquello es cuestión de tiempo, esfuerzo y constancia , ya que la delincuencia, el narcotráfico, el terrorismo y los grupos armados irregulares tienen raíces profundas a las que hay que eliminar definitivamente, sin contar que la delincuencia y la corrupción han llegado a enquistarse en las más altas esferas gubernamentales que van hasta la presidencia de la república, la Asamblea Nacional, el poder Judicial y hasta los mismos reclusorios o cárceles del país. Para lograr una lucha eficaz contra la delincuencia, la corrupción, el narco tráfico, el sicariato, el crimen y el secuestro, es menester fortalecer la cooperación entre todos los ecuatorianos sin distinción de credos e ideologías políticas, desterrando el odio y el celo político que tanto daño nos viene haciendo. El narcotráfico y otros delitos ya enunciados se han convertido en la principal fuente de financiación del terrorismo, sirviendo a los intereses de los grupos armados ilegales que ponen en peligro la gobernabilidad, obstruyen el desarrollo económico y social, debilitan las instituciones democráticas, aumentan la violencia, violan los derechos humanos y destruyen el medio natural. para hacer frente a esta realidad es necesario crear una estructura institucional que incluye la prevención, la investigación, la aplicación de la ley y las sanciones para los terroristas, aunque ello significa costos muy altos como la perdida de muchos soldados y policías, que luchan cada día para liberar nuestra patria de esta plaga que ha retrasado nuestro desarrollo en todos los órdenes. (O)
CMV
Licenciada en Ciencias de la Información y Comunicación Social y Diplomado en Medio Impresos Experiencia como periodista y editora de suplementos. Es editora digital.
Publicaciones relacionadas
Mira también
Cerrar - Porque esto es África23 de noviembre de 2024