¿Es posible una fusión bancaria trascendental en Ecuador?

Bladimir Proaño

Una hipotética fusión de los grandes del sector bancario y cooperativo del país, sacudiría el panorama financiero de Ecuador. Si se llegara a dar, el grupo resultante entraría con USD 20.360 millones en activos. En el Top 10 de los mayores de América Latina, un club en el que ahora no está presente ninguna entidad ecuatoriana y superaría el tamaño de todo el mercado bancario de países como: El Salvador, Honduras, Nicaragua o Paraguay. Y dentro del mercado bancario nacional, la nueva entidad reforzaría el dominio del mercado de los cuatro grandes en Ecuador. Controlarían el 34 % del crédito y el 36 % de los depósitos. 

Esta “concentración” ni de lejos se parece a la que ahora mismo se evidencia en España con la posible unión de dos bancos, el BBVA y el Sabadell, que alcanzarían una cuota de mercado de 23,44 % de los depósitos totales y el 23,87 % del crédito. Con esta posible fusión la competencia en el merecado español dejaría un mapa bancario con tres grandes entidades coparían un 71,6 % del mercado de crédito y un 73 % de los depósitos.

En el país hemos evidenciado que luego de la crisis bancaria del 2000, la reducción de los participantes del mercado, no ha resultado ser peligrosa, ya que no se ha producido exclusión financiera ni se ha sacrificado el desarrollo, pero claro, aún hay más por hacer en materia de inclusión y bienestar financiero. En la actualidad, los cinco bancos más grandes del país tienen el 74 % de los depósitos y el 73 % de los créditos, evidenciando una concentración que no ha secado para nada la competencia en el mercado bancario ecuatoriano, y esta industria evidencia características de un mercado oligopólico, donde el rasgo distintivo esencial es la interdependencia entre las acciones de las diversas entidades bancarias.

Por lo expuesto, la eventual unión de estas dos entidades no cambiaría, al menos por el momento, la estructura de mercado, quizá se acentúe su oligopolio y no debilitaría el poder negociador de los clientes, ni será capaz de influir sobre el precio (tasa de interés ) y sus acciones no provocaría reacciones relevantes por parte de sus rivales. (O)