Un tiro por la culata

Tatiana Neira Alvarado

Es lo que resultó el intento de la asambleísta Pamela Aguirre, de confrontar al prófugo Aleaga con la Fiscal General del Ecuador, abusando de una institución del Estado y de la condición de presidenta de la Comisión de Fiscalización.
Un burdo conato de emboscar a la Fiscal, pretendiendo contaminar el caso en el que es procesado “alias el ruso”, para que ella tenga que retirarse, no prosperó gracias a la inteligencia, conocimiento y oportuna reacción de Diana Salazar, atributos de los que carecen los embaucadores.
Sin sonrojarse la asambleísta Aguirre, pretende ‘tomarnos el pelo’, diciendo que antes de las 09h10 de la mañana del 13 de mayo no conocía que Aleaga iba a presentarse en la sesión de la Comisión, cómo si no fuese ella la que tiene que dar la orden para que se solicite la creación de un link de conexión y se envíe la contraseña de ingreso.
No pasó la afrenta a la Fiscal… el desespero y la torpeza son evidentes.
Aguirre quizá deba responder política y legalmente por sus acciones. (O)