A mediados de este mes de mayo, mientras la municipalidad del cantón Sígsig que buscaba obtener una acción de protección para frenar la explotación de la minería en las inmediaciones del río Santa Bárbara, los habitantes de diferentes comunidades protagonizaron una marcha por el centro de la ciudad, encabezados por sus distintos dirigentes. La acción de protección fue presentada al conocerse los estudios del agua y el suelo del río Santa Bárbara, los que muestran que el río Moya, lugar donde se origina el Santa Bárbara, no posee agua apta para la vida acuática y silvestre. Además, en el sector se encontraron materiales pesados como plomo y mercurio, productos de la actividad minera ilegal.
Por lo que la municipalidad pide que la fuerza pública desaloje los lugares de explotación y además solicitan que se adopten medidas cautelares para la protección de la naturaleza, por esta razón el alcalde y los técnicos municipales han recibido amenazas de la minería ilegal. La Dirección Zonal del Ministerio del Ambiente indicó que en el área de Ayllón se han concedido 21 autorizaciones para la pequeña minería ilegal.
De todas las concesiones, solo 5 han regularizado su petición mientras que las restantes 16 se han convertido en ilegales. Estos mineros ilegales son los que amenazan y no permiten que ingrese al lugar el equipo técnico de la Dirección Zonal del Medio Ambiente, ellos quieren realizar una inspección de control y seguimiento y verificar la utilización de plomo y mercurio, mientras tanto el agua y el suelo en estos lugares de explotación están alterados.
Por estas razones urge que la comisión de Biodiversidad de la Asamblea Nacional envíe los técnicos para que visiten el lugar ya que no se puede permitir que se continúe afectando la calidad de agua y la vida silvestre. (O)