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COLUMNISTA

Cinco, son la mitad

Al hablar de procesos sociales de construcción de la realidad, viene a la mente la teoría y los efectos de enmarcado o “framing”, donde básicamente la forma en la que se presenta la misma información puede provocar diferentes emociones y decisiones. Daniel Kahneman y Amos Tversky estudiaron estos efectos durante muchos años y demostraron cómo nuestras percepciones y comportamientos pueden ser influenciados significativamente por el contexto en el que se presenta la información.

Ellos encontraron que las personas valoramos las ganancias y las pérdidas de manera diferente, y cómo se enmarca una elección puede cambiar radicalmente nuestra decisión. Por ejemplo, la frase «90% de éxito» tiende a ser más favorablemente recibida que «10% de fracaso,» aunque ambas presentan la misma probabilidad.  Supongamos que en el supermercado vemos dos paquetes de carne. Uno dice «80% magra,» mientras que el otro dice «20% grasa.» La mayoría de las personas preferirán comprar el paquete etiquetado como «80% magra,» aunque ambos productos son exactamente iguales, pero el cambio en la presentación de la información influye mucho en nuestra elección.

Los efectos de encuadre no solo afectan decisiones individuales, sino también decisiones políticas y económicas. Es así como el contexto y la forma en la que se presenta la información es muy importante en la toma de decisiones, y es algo de lo que deberíamos estar conscientes para poder ser más críticos y reflexivos, e incluso para evitar manipulaciones sutiles o no tan sutiles. Así pues, intentemos considerar no solo la información que recibimos en sí, sino también cómo está enmarcada, después de todo, ya lo dijeron Les Luthiers: “de cada diez personas que ven televisión, cinco, son la mitad”. (O)

@ceciliaugalde

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