El “diablo” sigue en la Roca
En la historia del Ecuador, la sesión 944 de la Asamblea Nacional (AN) de este año, en la cual se le permitió a Wilman Terán hacer un sainete de lo más misterioso y extraño, con frases y dichos bajados de una nebulosa mental en la cual se habrían cocinado todos los conjuros, y materiales de pócimas raras, demostró que la AN es un lugar de turbación, porque 47 asambleístas de la RC impidieron juzgar políticamente al más grande de los sinvergüenzas y canallas, que por desgracia de este país, estuvo al frente de la institución cuya función era impartir disciplina en la Justicia ecuatoriana.
Desde el primer día de sus labores, un enloquecido Terán habló tal cantidad de sandeces, creyéndose un dios, el Brhama del hinduismo, aunque “sigo siendo humano” decía. Su comportamiento chiflado, le hizo acuñar la famosa consigna matemática de que 2 es mayor que 3, tomando decisiones de miedo en el Consejo de la Judicatura. La inusitada rapidez de sus resoluciones, todas sospechosas, encaminadas a romper la institucionalidad, manosear sentencias, cambiar funcionarios a medida de las necesidades de los corruptos, pronto revelaron sus objetivos. Quería alargar a los jueces de dudosa reputación en sus funciones, por pedido de quienes sabemos tienen un inmenso rabo de paja y viven en deuda con la justicia.
Metástasis, el caso más grande de investigación de la Fiscalía reveló que luego de la recuperación del celular de Leandro Norero, se encontraron hallazgos de “una serie de indicios de una estructura criminal incrustada en todos los niveles del Estado”, principalmente en el sistema judicial y penitenciario, dentro del cual Terán era el capo máximo.
Por el otro lado, la política y la sed de venganza de un grupo de innombrables buscaban de todas las maneras que Diana Salazar caiga en desgracia total. Para eso necesitaban a un iluminado del mal como Terán para que le humille, y se invente una serie de chats “creados” a través de mecanismos científicos de edición para formular una narrativa y tildar a la Fiscal de odiadora.
Estamos claros quienes manejan la estrategia. Los llegados a la AN a fastidiar, torpedear a la justicia, a mortificar con sus alocuciones, a potenciar un parlante de atrocidades que vienen en frecuencia ampliada desde Bélgica, en complicidad con el presidente Kronfle de la AN, que es el mejor ejemplo de la ridiculez y el populismo en el manejo de la legislatura.
Terán en su vuelo sideral, mostró los símbolos del por qué nuestro país es el hazmerreír de las sociedades racionales del mundo. Aunque faltaron 4 votos para conseguir la censura política, por la abstención de las correístas, el “diablo” se quedará en el infierno de la Roca. Los ecuatorianos decentes, tal como hizo Dante, pelearemos y derrotaremos a este Lucifer, para revelar su verdadera forma: un demonio sin alas. (O)