El hipo es tan común como desconocido, pues aún no se sabe con exactitud las causas que lo provocan. No obstante, existen factores que facilitan su aparición.
A todo el mundo le ha dado hipo.
Médicamente se conoce que esto ocurre cuando el diafragma (localizado debajo de los pulmones, es el principal músculo de la respiración) comienza a producir espasmos de manera involuntaria.
Los espasmos ocurren cuando una persona inhala de repente y sus cuerdas vocales se cierran.
Esto produce el sonido distintivo del ‘hipo’, ‘hic’, ‘hiccup’. Las causas comunes que pueden provocarlo son comer demasiado o muy rápido, las bebidas carbonatadas y el estar estresado o excitado.
Entre otros aspectos que desencadenan el hipo, constan aspectos como:
- Comidas picantes
- Líquidos calientes
- Comer y beber rápido
- Consumir ciertos medicamentos e inhalar humos nocivos
También se conoce que cualquier enfermedad o dolencia que irrite los nervios que controlan el diafragma, influyen para la aparición del hipo.
Además, se da por experimentar cambios bruscos de temperatura.
¿Cuándo se activa el hipo?
Cuando el diafragma se irrita, se activa el hipo. Si esto ocurre, el diafragma desciende de forma brusca, lo que hace que ingrese aire de golpe a la garganta.
Cuando el aire que ingresa a la garganta choca de manera repentina contra la laringe, las cuerdas vocales se cierran y sale un hipo.
Casi todos los episodios de hipo duran pocos minutos.
Algunos pueden durar días o, incluso, semanas, pero se trata de algo muy poco habitual y que suele ser un signo de otro problema médico.
¿Cómo enfrentarlo?
El hipo, de manera ordinaria, es inofensivo y puede durar desde varios segundos a varios minutos.
El aguantar la respiración es la manera más conocida para combatir el hipo. Para eso es necesario inhalar una gran cantidad de aire y aguantarla de 10 a 20 segundos.
Luego se debe exhalar suavemente. Para obtener resultados positivos, se debe repetir este proceso el tiempo que sea necesario.
Puede ayudar también las respiraciones lentas y medidas por varios minutos. Si el hipo persiste por varias horas, ya sea continuo o esporádico, es necesario buscar atención médica.
Otra de las formas efectivas de parar el hipo puede ser colocándose azúcar debajo de la lengua.
Por otro lado, existen factores de riesgo que determinan que los hombres sean más propensos a padecer hipo prolongado que las mujeres. Entre ellos, los problemas mentales o emocionales.
Además, pueden interferir en la aparición de problemas como la ansiedad y el estrés.
Otra situación particular es en el caso de una cirugía. Algunas personas tienen hipo luego de recibir anestesia general o de procedimientos que involucran órganos del área abdominal.
O porque no, se puede probar con un remedio clásico y muy conocido, un buen susto. (I)
Medicamentos y procedimientos del hipo
No hay una manera eficaz para detenerlo. Pero si este dura más de unos pocos minutos, hay remedios caseros que puede brindar alivio. No obstante, no están totalmente comprobados.
Un de ellos consiste en respirar dentro de una bolsa de papel, también, hacer gárgaras con agua helada y contener la respiración.
Otras acciones que pueden servir son beber sorbos de agua fría.
Si usted sufre de hipo con frecuencia, los cambios en el estilo de vida podrían ayudar.
Por ejemplo, evitar las bebidas carbonatadas y los alimentos que te causen gases. Además, comer porciones más pequeñas.
Para los casos de hipo prolongado, puede resultar útil intentar con tratamientos alternativos, como la hipnosis y la acupuntura. (I)
Datos sobre el hipo:
- Los síntomas del hipo incluyen espasmos incontrolables en el diafragma y un sonido de ‘hic’.
- A veces, puedes sentir una ligera sensación de opresión en el pecho, el abdomen o la garganta.
- Si el hipo dura más de 48 horas o si es tan intenso que causa problemas para comer, dormir o respirar, acudir al médico.
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