Una “muerte lenta” es lo que padecen casas de acogida que protegen a grupos vulnerables (niños, niñas, adolescentes, adultos mayores y mujeres víctimas de violencia) en Cuenca.
Esto, frente a la falta o retraso en la inyección de recursos por parte del Estado.
La actual Constitución, en sus artículos 341 y 342, garantiza por parte del Estado las condiciones para la protección integral de sus habitantes… En particular hacia aquellos grupos que requieran consideración especial por la persistencia de desigualdades, exclusión, discriminación o violencia, o en virtud de su condición etaria, de salud o de discapacidad.
Además, señala que “el Estado asignará, de manera prioritaria y equitativa, los recursos suficientes, oportunos y permanentes para el funcionamiento y gestión del sistema”.
No obstante, desde noviembre de 2023, según la red de centros de acogida de Cuenca, existen retrasos o, en algunos casos, la ausencia de pagos para financiar sus proyectos para la protección de los grupos vulnerables en Cuenca.
“Agonizamos”, reveló María Rosa Corral presidenta de la Fundación San Vicente de Paúl y actual directora del Hogar Infantil Tadeo Torres, al referirse a la crítica situación que vive el centro que dirige y los otros centros de acogida en Cuenca.
Casas de acogida venden su patrimonio
La crisis se agudizó en el Tadeo Torres, y para la Fundación San Vicente de Paúl, al punto de poner a la venta muchos de sus bienes para poder solventar los gastos que implica el cuidado de los niños.
Uno de los bienes emblemáticos que se han puesto a la venta es el centro en el que funciona el hogar infantil en la actualidad, en Capulispamba, y en el que residen 33 niños en situación de vulnerabilidad.
Corral reconoció los esfuerzos del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), de la zona 6, no obstante, esto no ha garantizado que los pagos se cumplan a tiempo y según los compromisos acordados en los convenios firmados con esta entidad gubernamental.
Es más, el convenio que debía firmarse en enero de este año, recién se firmó en julio, y de los 129.000 dólares que debían recibir, “no le ha llegado nada”, refirió la directora.
En la actualidad tienen un déficit de, al menos, 150.000 dólares, entendido que el Tadeo Torres se sostiene con 500.000 dólares al año.
Gracias a los bienes que poseen como fundación, adquiridos a lo largo de 150 años de vida institucional, y a la autogestión de su directorio, pues el Gobierno solo les apoya con entre el 30 y 40 % de lo que invierten, no han limitado la atención.
“Llegará un punto en el que no aguantemos más… Y lo que nos preocupa, ¿A dónde van a ir los niños?”, comentó Corral entristecida.
Además, recordó que esta y otras fundaciones e instituciones de acogida de Cuenca asumen este rol que es competencia directa del Gobierno y que, por esa razón, debería condolerse de su situación y darles una solución inmediata.
Casas de acogida que buscan erradicar trabajo infantil
De su parte, Katy Orellana, Directora de Fundación Alianza en el Desarrollo, proyecto de erradicación de trabajo infantil, comentó que, en su caso, si bien ya les cancelaron del primer semestre en el marco del primer convenio anual, hasta el sábado reciente ya se les adeudaba cerca de dos meses.
No obstante, calificó a los primeros meses de este año de la Fundación de “complejos” y que eso los ha llevado a analizar acciones las próximas semanas.
“Todos los centros nos apoyamos en los problemas”, dijo al referirse a la red de centros de acogida que se ha formado en Cuenca y que reúne a unas 9 instituciones a las que el Estado les adeuda rubros presupuestarios.
En ese sentido, planean reunirse los próximos días para conocer la situación individual de cada centro, saber si firmaron los convenios, si se les ha pagado y saber qué acciones van a tomar.
En su caso, los primeros cinco meses de 2024 se financiaron con un préstamo que cubrieron cuando el Estado les transfirió lo que adeudaba del primer semestre.
Mientras tanto, pagaron intereses para solventar el pago a sus trabajadores.
Convenio y trabajo
Hoy, mantienen un convenio con el MIES para financiar los gastos de 60 niños. No obstante, en el centro se atiende a 120 niños de las zonas urbanas y rurales de Cuenca.
Además, realizan autogestión para otros proyectos.
“El Estado debe garantizar la atención de los niños… Lo que nosotros ejecutamos con los fondos del MIESS no nos alcanza… Nosotros gestionamos recursos a través de concursos internacionales”, reveló Orellana.
Ellos trabajan con menores en situación de mendicidad, o hijos de trabajadores de mercados o recicladores, vendedores ambulantes, es decir, gente que trabaja en economía autónoma.
Orellana dijo que si bien desde el MIES les han explicado ya han hechos su parte y que ahora le compete a Finanzas transferir los recursos, “el MIES debería coordinar con Finanzas, ya que ambos son entidades del Estado y son quienes debe asumir la responsabilidad financiera”, enfatizó.
Respuesta del MIES sobre casas de acogida
Camila León, actual coordinadora zonal del MIESS refirió a El Mercurio que “algunos centros tienen un retraso en el pago… Estamos haciendo todo desde el MIES para presionar a Finanzas… Porque todos los trámites ya salieron del MIES, solo falta que el Finanzas desembolse”.
Según la coordinadora, ya pidieron mediante Quipux “a inicios de la semana anterior para que les ayuden con 17 pagos pendientes, debido al malestar que esto genera”.
Además, detalló que “los convenios tuvieron que firmarse por nuevas disposiciones y acuerdos ministeriales, ahora, en mi gestión… Sin embargo, algunos cooperantes no tuvieron la documentación completa, entonces en lugar de firmar en junio (como la mayoría) tocó ahora en julio”, explicó. (I)-(FCS)
Adultos mayores en riesgo
En el caso de los adultos mayores, el centro que más problemas ha presentado los meses recientes es el Hogar Miguel León. Hasta junio de este año les adeudaban 115.000 dólares.
“Los compañeros están sin sueldos… No podemos pedir paciencia porque tienen sus familias… Financieramente no damos más y estamos propensos a limitar el servicio”, señaló semanas atrás a El Mercurio, María Augusta Gordillo, directora del centro.
Desde la casa de acogida ya firmaron el convenio y presentaron los informes del servicio que brindan, pero no reciben se desembolse desde inicios de año.
Por esta razón, no ha cancelado los sueldos a los trabajadores.
Además, deben a proveedores quienes ya no quieren “fiarnos nada”. Mientras tanto, la situación de las personas a su cargo es preocupante.
Además, Gordillo señaló hace unas semanas que autoridades locales les ofrecieron dar respuesta y dialogar entre ministerios para solucionar los problemas, pero esto no ha ocurrido.
Por ende, no descartan cerrar sus puertas frente a la grave crisis que les queja.
Mujeres víctimas de violencia
En marzo de este año, se publicó el decreto 192 en el que se declaró a las Casas de Acogida y Centros de Atención Integral especializados para mujeres víctimas de violencia basada en género, como servicios de protección y atención esenciales.
Asimismo, se decretó el fortalecimiento de estos servicios de protección, así como todo servicio especializado existente de atención y protección a víctimas de violencia.
Para esto, el Ministerio de la Mujer y Derechos Humanos, en conjunto con el de Economía y Finanzas, analizarán la disponibilidad presupuestaria para la creación de nuevos servicios, con énfasis en el área rural del territorio nacional.
Blanca Pacheco, Directora de la Fundación Casa María Amor de Cuenca, se pronunció a través de un video publicado el 4 de julio por la Red Nacional de Casas de Acogida, y subrayó en la importancia de la declaratoria de las casas de acogida como servicio esencial.
Esto significaba dar respuestas a las necesidades de las mujeres y asumir, por parte del Estado, “la responsabilidad absoluta de garantizar servicios especializados, atención y acompañamiento de mujeres, sus hijas e hijos que huyen de la violencia”.
Pacheco agregó que “es fundamental… garantizar los presupuestos efectivos y suficientes para que puedan atender a la población 24/7”.
Por lo tanto, finalizó diciendo que “exigimos que exista una respuesta estatal y su apoyo ininterrumpido”.
Datos sobre casas de acogida:
- Se es estima que hasta 2021, el MIES atendió a más de 28.000 niños, niñas, adolescentes, personas con discapacidad y adultos mayores de Azuay y Cañar.
- Cada centro de acogida debe garantizar servicios en las áreas de psicología, trabajo social, asesoría legal, entre otras.
- Durante 2022 se firmaron 21 convenios con 4 con casas de acogida y 17 con centros de atención integral para mujeres víctimas de violencia.
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