Sin lluvias en Azuay aumentan los riesgos de cortes de luz en Ecuador

La falta de lluvias en Azuay eleva el riesgo de cortes de electricidad. En Cuenca van 19 días sin lluvias de intensidad.

Falta de lluvia en Azuay hace que baje la producción de electricidad en Mazar.
La falta de lluvia en Azuay ha hecho que baje la generación de electricidad en Mazar y otras centrales hidroeléctricas.

Azuay cumplió, este 1 de agosto de 2024, 19 días sin lluvias de intensidad y esto ha provocado una baja en la generación de electricidad en las centrales hidroeléctricas que están en esta zona y que producen la mayor parte de energía que demanda el Ecuador. No se descarta el riesgo de cortes.

Se trata de Mazar; Paute – Molino; Sopladora; y Minas – San Francisco. Las tres primeras reciben agua del río Paute, que el último 13 de julio alcanzó un caudal de 352,49 metros cúbicos por segundo (m³/s) y este 1 de agosto estuvo en 55,46.

Mientras que la última es alimentada por el río Jubones, que el 14 de julio estuvo en 51,38 m³/s y ayer en 12,02. Esta está junto a la vía Cuenca – Girón – Pasaje, en el límite con el Oro.

Asimismo, el 3 de julio Mazar, por ejemplo, llegó a un pico de generación de electricidad de 3.460,67 megavatios hora (Mwh) y al medio día de este 1 de agosto estuvo en 135,65, con dos de sus tres unidades en operación.

En este mismo periodo Paute – Molino pasó de generar 20.241,78 Mwh a 3.161,54 (con ocho de sus 11 unidades); Sopladora de 453,02 a 291,61 (con dos de sus cuatro unidades) y Minas – San Francisco de 272,25 a 21,75.

En Azuay no hay lluvias: se adelantó el estiaje y pueden haber cortes de electricidad

Fabián Montaleza, ingeniero en medio ambiente y exasesor de la Asociación de Municipalidades del Ecuador (AME), explicó que estaba pronosticado que el estiaje comience en septiembre, pero se adelantó.

Es por eso que la Corporación Centro Nacional de Energía (CENACE) aplica un plan para mantener en condiciones óptimas los embalses de Mazar; Paute – Molino; y Sopladora con el fin de garantizar la provisión de energía.

En junio de este año estas tres centrales producían el 36,1 % de la energía hidroeléctrica del país, pero su producción bajo casi en un 17 % por la falta de precipitaciones.

Montaleza señaló que es probable que esta sequía se extienda hasta noviembre por lo que hizo un llamado a la población a ahorrar el agua y tomar algunas previsiones en caso de “apagones”.

Ríos con bajo caudal en Cuenca por la falta de lluvias

En Cuenca la falta de lluvias ha provocado una reducción en los caudales de los cuatro principales ríos de acuerdo con datos de la Red Hidrometeorológica de la Empresa de Telecomunicaciones, Agua Potable y Alcantarillado (ETAPA EP).

Por ejemplo, el Tomebamba, cuyo caudal promedio es de 6,5 m³/s, ayer estuvo en 1,59; y el Yanuncay, que debe estar en seis bajó a 1,49. El Tarqui pasó de 3,5 a 1,20 y el Machángara de 4,5 a 3,16.

De acuerdo con Rigoberto Guerrero, de ETAPA EP, si bien en la ciudad han caído ligeros “chubascos” estos no son representativos para recargar los niveles de los ríos.

A decir de Guerrero, Cuenca vivió una sequía de 118 días, que terminó en diciembre de 2023. Por ventaja no hubo cortes del servicio de agua potable gracias a previsiones que hizo ETAPA EP.

Cuenca, actualmente, también vive una ola de frío que se debe, entre otros factores, a la disminución del contenido de humedad en los diferentes niveles de la tropósfera y menor cantidad de nubosidad en la región.

El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI) advierte que es posible afectación a cultivos en zonas que están por encima de los 2.850 metros sobre el nivel del mar (msnm).

Cifra

118 días de sequía hidrológica vivió Cuenca en 2023.