El discurso de inseguridad en el Ecuador es un tema que nos preocupa y una situación que afecta al país en diversas formas.
Sin duda, la industria del turismo ha sido una de las más lastimadas. Con escasez de viajeros y menos consumidores de servicios turísticos, se ha puesto en riesgo la posibilidad de una activación sostenible para este sector.
Y es que, la narrativa de como presentan a nuestro país a nivel internacional no ayuda; se nos muestra, como un pueblo sumido en el terror, la inseguridad y la violencia… un país en guerra.
Generalizar; como única, una realidad solo de algunos sectores, cantones y provincias podría ser nefasto para esta industria.
El esfuerzo, la creatividad y la resiliencia de emprendedores y empresarios no ha sido suficiente para que las cifras reflejen una economía más saludable.
Se puede invertir en sofisticadas campañas de marketing, contratar fotógrafos e influentes, crear puntos de información, ir a ferias internacionales, incluso ganar premios; pero si la narrativa oficial no es coherente con estos esfuerzos, pasarán años para poder garantizar credibilidad y asegurarnos que el riesgo país baje.
Representantes destacados* del sector turístico sugieren un plan de contingencia urgente para rescatar a esta industria y recomiendan una campaña internacional para levantar la alerta de “Bandera Roja/No viaje al Ecuador”. (En ésta se saca al país del mapa como un destino turístico.)
No es mala idea, crear estrategias de “destino seguro” para recuperar los espacios perdidos, que deberían ser impulsadas por los agregados comerciales de cada embajada.
Así como también; el MITUR , podría abrirse al dialogo y enriquecerse de la experiencia y capacidad de gremios, empresarios, emprendedores y respaldar su participación. (O)
