Cuatro cadáveres hallados este miércoles 7 de agosto de 2024 en la costa de Ecuador corresponderían con los cuatro jóvenes que se encontraban desaparecidos desde la madrugada del domingo, tras haber sido vistos por última vez en la localidad costera de Puerto López.
Entre los cuerpos encontrados hay dos hombres y dos mujeres, y uno de los familiares de los jóvenes desaparecidos llegó a identificar a uno de ellos «a simple vista», según comentó a periodistas Rodrigo Cruz, subjefe de la Policía en la jurisdicción de Santa Elena.
Los cadáveres fueron ubicados en Curia, una zona de la comuna de Olón, en la provincia costera de Santa Elena, a 36,5 kilómetros al sur de Puerto López, que se encuentra en la provincia de Manabí.
En cambio, el vehículo en el que se trasladaban había sido encontrado el domingo en una zona de la población de Naranjal, cercana a la ciudad de Guayaquil, y a unos 300 kilómetros por carretera de Puerto López.
En Naranjal se encuentra detenido desde el domingo, por su presunta relación con este crimen, un hombre con antecedentes penales por secuestro y robo.
El jefe nacional de Criminalística de la Policía Nacional de Ecuador, Carlos Perugachi, indicó desde el lugar del hallazgo de los cuerpos que la identidad de los cadáveres será confirmada una vez que se practiquen las pruebas y las autopsias en el centro forense de Santa Elena.
En cambio, confirmó que el lugar donde fueron encontrados los cadáveres no corresponde con el lugar en el que fueron asesinados, ya que en este punto únicamente fueron depositados los cuerpos.
Los cadáveres fueron hallados después de que en el transcurso del martes la noticia de la desaparición de los cuatro jóvenes trascendiera a nivel nacional.
Puerto López, el lugar donde los cuatro jóvenes fueron vistos por última vez, es una de las más turísticas del país al ser uno de los mejores puntos para el avistamiento de ballenas jorobadas entre los meses de junio y octubre, pero en los últimos años se ha visto impactada por la violencia de las bandas criminales que operan en el eje costero de Ecuador.
En marzo se registró en esta localidad la masacre de cinco turistas de un grupo de once, en un hecho que la Policía atribuyó a una posible confusión por parte de una banda criminal que buscaba atacar a otra por el control de la zona.
También el pasado año fue asesinado en la víspera de las elecciones locales el candidato a alcalde de Puerto López Omar Menéndez, quien al día siguiente ganó los comicios de forma póstuma con el 46,22 % de los votos.
Ecuador se volvió el primer país de Latinoamérica en homicidios per cápita, con una tasa de 47,2 por cada 100.000 habitantes en 2023, ocho veces mayor respecto al año 2016, producto del auge de la violencia de los grupos criminales, principalmente dedicados al narcotráfico, aunque también están incursionando en la minería ilegal.
Desde inicios de año el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, elevó la lucha contra el crimen organizado a la categoría de «conflicto armado interno«, con lo que pasó a catalogar a estas bandas como grupos terroristas y actores beligerantes no estatales, a la vez que decretó un estado de excepción con el que, entre otras acciones, militarizó las cárceles.
De acuerdo al Gobierno, las muertes violentas a nivel nacional han descendido un 17 % en 2024 respecto al año anterior, pero los episodios de violencia criminal no han cesado, a la vez que también se siguen reportando secuestros y extorsiones. EFE