Ferrari al inicio de curso, McLaren después y Mercedes en los últimos grandes premios. Todos ellos se han mostrado con capacidad de acechar el ritmo del tricampeón del mundo, el neerlandés Max Verstappen (Red Bull), que, en el GP de su «casa», en Países Bajos, quiere conocer si alguno de sus rivales da el paso definitivo para pelearle el Mundial en el regreso de vacaciones.
El escenario serán los 4.307 metros del circuito de Zandvoort (Países Bajos), un trazado que Verstappen conoce bien y que cuenta por victoria en cada una de sus tres últimas visitas, aunque eso mismo ocurría en el circuito de Spa-Francorchamps, donde había ganado en las tres últimas ocasiones, y terminó cediendo la primera posición al británico Lewis Hamilton (Mercedes).
Y es que ‘Mad Max’ acumula una sequía nunca vista en los últimos tiempos, pues lleva cuatro grandes premios consecutivos sin subirse a lo más alto del podio, pero nadie ha sabido aprovechar esta auténtica anomalía que no había ocurrido en los últimos tres años, en los que Verstappen siempre se había mostrado incontestable.
Con 277 puntos, Verstappen ha pasado este mes de vacaciones con 78 puntos de diferencia respecto al britanico Lando Norris (McLaren), incapaz de ganar ninguna de las cuatro carreras en las que Verstappen no venció y en las que incluso hubo de dejar pasar al australiano Oscar Piastri (McLaren), su compañero de equipo, en Hungría y verle conseguir el triunfo.
A falta de diez grandes premios para acabar el año, el gran aspirante a pelearle el Mundial parece que sigue cambiando cada dos meses, y ahora son los británicos de Mercedes Lewis Hamilton y George Russell los que cuentan con el ritmo para parar al neerlandés.