Andrés Brito: Un sigseño que buscó mejores días en EE.UU.

Andrés Brito coloca alfombras en Estados Unidos. Foto: cortesía

Jugó al fútbol desde los 7 años de edad. Defendió los colores de varios equipos del Ascenso Azuayo y vistió los colores de dos clubes en Primera División del Ecuador. Hoy, Andrés Brito, radica en Minnesota, Estados Unidos, junto a su familia y aspira algún día regresar a su Sígsig querido.

En su tierra natal, Brito fue pionero en entrenar a arqueros, realizó tres ediciones consecutivas la denominada ‘Batalla de Porteros’, sin embargo, en 2019, ante la falta de nuevas oportunidades decidió tomar el camino más complicado, emigrar a los Estados Unidos.

Primero, fue solo. Fue cobijado por su papá, lo asentó, le ayudó a acoplarse al nuevo estilo de vida y comenzó a trabajar. Su próximo paso fue juntarse con su esposa e hijas y lo logró años más tarde. Hoy, su familia que lo integran cinco, están juntos, estudian y trabajan en Minnesota.

Sin embargo, cuenta que la viva, aunque es ‘otro mundo’, siempre está en el pensamiento en volver a su casa.

“Acá, al principio fue muy duro. Es otro estilo de vida. Acá primero trabajas, luego sigues trabajando y después piensas en divertirte”, comenta.

Arquero

Andrés Brito, recuerda que, en sus años como deportista, ha vestido un sinnúmero de camisetas, sobre todo de Segunda Categoría del Azuay, pero también dio el salto al profesionalismo, puesto que militó en Liga Deportiva de Cuenca en 2008 cuando el club estuvo en la Serie B.

Así como en Universidad Católica de Quito en la Serie A. “En la católica, en ese entonces era el entrenador Patricio Lara y él nos llevó a tres azuayos, los primos Juan y Valentín Cedillo y mi persona”.

También militó en el club San Francisco de Cañar donde jugó Segunda Categoría. Compartió arco con Robín Pico, quien dice ser su mejor maestro, porque de él aprendió mucho.

Tras dejar el fútbol, en su natal Sígsig, decide abrir su propia escuela de arqueros, lo denomina ‘Orco’, y con ello reúne a decenas de niños de todas las edades. Luego de eso y para dar oportunidad a sus jugadores crea el evento deportivo denominado ‘Batalla de Arqueros’, un evento que por tres años consecutivos reunió a cientos de deportistas de toda la provincia. El evento se realizaba en el estadio municipal del cantón.

Dura decisión

Andrés cuenta que, tras casarse con su vecina María Constante, su ritmo de vida cambió y con ello decidió tomar una dura pero acertada decisión: migrar a los Estados Unidos.

Hoy, el exportero profesional, se dedica a la colocación e instalación de alfombras en el estadio Minnesota, donde labora desde temprano y hasta altas horas de la noche.

Pero, Andrés tiene un sueño, si bien lo primer propósito fue el reunir nuevamente a su familia en los Estados Unidos, su mayor anhelo es construir una vivienda en su cantón natal y disfrutar de lo lindo que es Sígsig.

“No puedo decirle cuando volveremos, pero seguramente será cuando tengamos lo justo y lo necesario”. “Ahora que mi papá se regresó al Ecuador extraño su seco de pollo y de mi mami su sopa de fideos. Además de la compañía de mis amigos con los que crecí desde niño”, acotó.

Finalmente, Andrés Brito, un hincha apasionado del club El Nacional, confiesa que entre otros cosas, que extraña del Sígsig es jugar en los tradicionales Jornadas Deportivas Vacacionales que se realizan anualmente. Aunque confiesa que en Connecticut se han reunido un buen grupo coterráneos y han organizado un evento similar a las Jornadas Deportivas. (I)