El Gobierno de Ecuador espera recibir de momento a entre nueve y once jefes de Estado y de Gobierno para participar en la XXIX Cumbre Iberoamericana, según anticipó en una entrevista con EFE la ministra ecuatoriana de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, Gabriela Sommerfeld, quien dijo confiar en que México esté representado.
A menos de un mes de la celebración de esta cumbre, que tendrá lugar los días 14 y 15 de noviembre en Cuenca (Ecuador), la canciller ecuatoriana detalló que nueve gobernantes ya han confirmado su presencia en esta cita, entre ellos el rey de España, Felipe VI; el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez; y los presidentes de Argentina, Javier Milei; Paraguay, Santiago Peña, y República Dominicana, Luis Abinader.
También mencionó a los vicepresidentes de El Salvador y Uruguay ya los cancilleres de Chile y Costa Rica.
Al mismo tiempo esperan la confirmación por escrito de otros dos jefes de Estado que han expresado verbalmente su intención de viajar a Cuenca.
Respecto a la participación de México, Sommerfeld manifestó su confianza en que el Gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum envíe a una representación, pese a que las relaciones entre ambos países están rotas desde abril pasado a raíz del asalto policial a la embajada mexicana en Quito para detener a Jorge Glas, exvicepresidente ecuatoriano durante la Presidencia de Rafael Correa.
La ministra recordó que México ha asistido a varios foros y reuniones preparatorias para la Cumbre Iberoamericana de jefes de Estado y de Gobierno, y reiteró su disposición a dialogar para solucionar la controversia entre ambos países.
«Como a través de este mismo medio (EFE) expresé hace varios meses atrás, Ecuador siempre ha estado listo para sentarnos a conversar con toda la situación que ambos países vivieron y con la verdad sobre la mesa para encontrar soluciones«, comentó Sommerfeld.
Llamados al consenso
La canciller de Ecuador consideró que la cumbre será un éxito si, con la presencia de los veintidós países y de los mandatarios que ya han confirmado su asistencia, se adopta la Declaración de Cuenca con los acuerdos alcanzados en la serie de foros previos que se han mantenido en el transcurso de este año.
«(Si se logra eso) quiere decir que nosotros sí tenemos la capacidad de consensuar, de dejar de lado las diferencias tal vez radicales o extremas que pueda tener cada uno y buscar esos puntos donde vemos que podemos trabajar de forma conjunta en beneficio de nuestros países y nuestra población«, señaló Sommerfeld.
«Es lo importante de estos foros: encontrar estos consensos, mantener los canales de comunicación abiertos, respetar las diferentes formas de pensar, pero encontrar aquellos acuerdos sobre los que estamos decididos y nos estamos comprometiendo a trabajar en beneficio de un desarrollo sostenible«, agregó.
Soluciones a crimen, desempleo y migración
Sommerfeld coincidió con la Secretaría General Iberoamericana (Segib) en dar pasos hacia un desarrollo sostenible que permita cumplir la Agenda 2030 e incidió en la necesidad de buscar soluciones innovadoras para la crisis migratoria, el crimen organizado transnacional y el desempleo juvenil.
Para la ministra de Exteriores se trata de tres problemáticas que afectan sensiblemente a Ecuador pero que son transversales a toda la comunidad iberoamericana y requieren «estrategias innovadoras».
«La diáspora, particularmente en Latinoamérica, se ha dejado sentir por la crisis económica y de seguridad que aqueja nuestros países, no únicamente al Ecuador», reseñó la canciller.
Asimismo, sostuvo que el desempleo juvenil lleva a que los jóvenes sean captados por la delincuencia organizada a falta de oportunidades, ya sea en estudios o en empleo.
Fondo contra delincuencia trasnacional
La canciller también destacó la celebración de un foro previo de seguridad donde se acordó un fondo común para combatir el crimen organizado transnacional y el terrorismo.
«Lo que estamos viendo es que ya se ha levantado la conciencia de la corresponsabilidad que existe entre diferentes países y no solamente de Iberoamérica para solucionar a problemas que hoy aquejan a Iberoamérica», apostilló.
Sommerfeld señaló que Cuenca recibirá a unas 1.200 personas para la Cumbre Iberoamericana, durante cuya celebración prevén suspender los cortes programados del servicio eléctrico de varias horas de duración al día que se dan desde septiembre por una sequía en las principales centrales hidroeléctricas del país.
«Cuenca es una ciudad mágica y maravillosa con mucha historia, patrimonio y parques naturales, donde Ecuador va a expresar su cultura a través de la gastronomía, a través del arte, a través de la danza, en la música, las artesanías y vamos a brindar una experiencia única en un lugar que es un paraíso», concluyó la jefa de la diplomacia ecuatoriana. EFE