El viernes en la mañana supe del fallecimiento de la Jani (Janina Rivera,1993) y se me rompió el corazón en mil pedazos otra vez. Joven abogada, feminista, defensora de derechos humanos, valiente y comprometida a más no poder frente a la violencia y la discriminación por razones de género, desprendida con las sonrisas y feroz con las palabras, una potente litigante de carácter fuerte.
Se podría decir mil cosas más de la Jani, sobre todo de la falta que hará en las reuniones de la Mesa de Género o de la RIAP VIF, con esa perspicacia para callar, aprender e intervenir. Su prematura partida nos deja un sinsabor en la boca y mas dudas que respuestas, es difícil entender que la muerte se la lleve cuando aún tenía proyectos y sueños, sobre todo, que las mujeres accedan a la justicia de forma oportuna y ágil.
Para el movimiento feminista de Cuenca sin duda implica una pérdida enorme, para su familia y sus amigas un dolor difícil de reparar. Solo nos queda el compromiso de seguir trabajando con su alegría y por sus sueños, que son los mismos de todas. El mundo sigue girando, los anti derechos ganan elecciones y los fascistas hacen campañas humanitarias, pero nuestra lucha sigue vigente y ahí te recordaremos siempre. (O)