Polaco corre al ritmo de Deportivo Cuenca

En el mundo del deporte, los entre- también de camaradería y motivación. En este entorno, el Deportivo Cuenca tiene un miembro especial que, aunque no es un jugador, se ha ganado el cariño y respeto de todos: Polaco, el amigo peludo que asiste fielmente a cada sesión de trabajo del plantel. 

‘Pola’, como lo llaman varios miembros del club, tiene más afinidad y apego con Marcelo Ortega, quien es uno de los utileros con más años en el equipo. Tiene 54 años, 24 dedicados al equipo morlaco. Es uno de los primeros trabajadores que llegan a la cancha en Victoria del Portete. También es el último que se retira de estas instalaciones. 

Ortega se transporta en una motocicleta y cuando llega a la plaza central de esta parroquia, Polaco está atento y lo sigue hasta la cancha. Allí, ‘Marcelito’, lo recibe con comida y otros “manjares”.

Los jugadores también se unen al saludo y es uno de los personajes más mimados en el ambiente colorado. 

“Hace casi dos años y medio que el peludito llegó a la familia del Deportivo Cuenca. Soy el que le da alimentos, pepas y frutas. Le abandonaron en la vía. En el Club se ha convertido en la mascota oficial cuando llegamos a esta cancha. Tras terminar los entrenamientos, él se regresa a la plaza y va a una casa en donde lo llaman como Manchas, pero acá lo tenemos con otro nombre (sonríe)”. 

Ortega comentó a este medio de comunicación que el año anterior recibió un tipo de auspicio para recibir alimento de perro. Espera que esta nueva temporada no sea la excepción.

Con su pelaje brillante y su energía inagotable, Polaco ha sido testigo de innumerables momentos que se quedan en esa cancha. Este amigo peludo se ha convertido en una especie de amuleto de buena suerte, siempre presente durante las prácticas, corriendo alrededor de los jugadores, observando cada pase y jugada con un entusiasmo contagioso. 

Disfrutan de su compañía

Los jugadores, entrenadores y todo el personal del club disfrutan de su compañía. Para ellos, el peludo no es solo una mascota, sino un verdadero miembro del equipo. A menudo se le puede ver correteando detrás de las pelotas, un reflejo de la energía que los futbolistas ponen en cada sesión. 

Uno de los elementos que abraza al ‘Pola’ y se recupera de los entrenamientos con un abrazo es el defensor cuencano Mateo Piedra. 

Según Piedra, este compañero peludo ha demostrado ser un verdadero “talismán” para el equipo.

La presencia de Polaco le da fuerzas para seguir adelante, incluso cuando las piernas ya no responden y el cansancio se hace presente. En cada ladrido, hay una dosis extra de motivación que eleva el espíritu de todos.

Otro de los miembros del Club que disfruta la presencia de este can, es Jorge Verdugo, relacionista público. 

Menciona que, aunque no lleva un número en la camiseta ni juega los partidos oficiales, ya

es un invitado especial en Deportivo Cuenca, un fiel compañero que nunca falta en los entrenamientos.

¿Por qué el nombre?

Ortega cuenta a El Mercurio que el nombre del ‘amigo de cuatro patas’ deriva del expreparador de arqueros, hoy en Delfín, Alejandro ‘Polaco’ Salas.

“La cresta de su cabello era color tomate, entonces el perro es blanco con tomatito y le puse Polaco”.