Ahora Leonidas Iza está muy conciliador, ya no es el violento de 2019 y 2022; cree que es hora de entrar en amistad con la sociedad; define a Luisa como social demócrata, y dice no tener nada en común con el discurso del prófugo. Respetando las distancias y la historia, casi como cuando Fidel Castro y los barbudos irrumpieron en Cuba haciéndose pasar por nacionalistas, o en aquella entrevista de Hugo Chávez cuando convenció a los incautos venezolanos de que iba a respetar la propiedad privada y a unir esfuerzos por sacar al país de la crisis de forma democrática. Así se han quedado en el poder 65 y 25 años, respectivamente.
Al menos cuatro estrategias se vislumbran en el actuar de la RC.
La primera, la propuesta del “Caín” Xavier Lasso para una nueva Ley Mordaza, al estilo del Goebbels hitleriano, en el cual la verdad es la del discurso oficial, con la cual condenó semanalmente, con el ahora escondido Carlos Ochoa, a los contenidos de los medios de comunicación y opinión de articulistas independientes. Eso quieren, para acallar cualquier comentario en su contra y sancionarlo. Para muestra lo de Martín Pallares, declarada persona “non grata” por el Concejo Cantonal de Guayaquil bajo el mando de Aquiles Alvarez, porque al accionista de COPEDESA, no le gusta la opinión del periodista.
La segunda, es preparar el camino para la desdolarización “ordenada” cuya aspiración les quita el sueño a Diego Borja y al “lelo” Arauz quien en sus delirios “sanpetersianos” pide ayuda a la China para interceptar meteoritos. Decir de frente que ocuparán los más de 8 mil millones de dólares del dinero público de la Reserva Monetaria, es declararle la guerra a la estabilización económica, tal como es la aspiración de Maduro y de los trasnochados del BRICS, supuestamente para competir contra la moneda hegemónica en el mundo.
La tercera, es suavizarle a Luisa para hacerla aparecer con nuevo “look”, y un discurso más refinado, pretendiendo comer el cuento a los ecuatorianos, como hizo pensar en alguna intervención, de un aparente distanciamiento con Correa. Desde Bélgica, ya condenó las travesuritas de dos de sus niños malos: la del nombramiento de Carlos Riofrío, ex subcontralor de la época de Celi, a un cargo de Asesoría en la alcaldía de Pabel; y las insinuaciones de Paola Cabezas de que la RC podría apoyar la intervención de fuerzas extranjeras para combatir la violencia, propuesta del presidente Noboa, y que por ejemplo, ya tuvo el apoyo de Claudia Sheimbaum hacia Trump, con quien se encuentra en un coqueteo de a “madres” como dicen los mexicanos.
La cuarta, reforzar a Patiño y su combo para el trabajo sucio, como el operativo de los afiches falsos, visibles en muchas zonas en Quito, diciendo que Ecuador apoyará con becas y dinero a los venezolanos, práctica xenofóbica e instrumento de malestar y división en los compatriotas. Y las amenazas de miedo en las zonas en las cuales la población es vulnerable, tal como ya se ha denunciado ante la Fiscalía terminada la primera vuelta electoral.
Luego del “encierro” para el entrenamiento de la candidata González en quién sabe dónde, veremos su comportamiento para las próximas semanas, antes del 13 de abril. (O)
