1975 fue declarado por Naciones Unidas, Año Internacional de la Mujer y se conmemoró por primera vez el 8 de Marzo como el Día Internacional, proclamado formalmente en 1977 por la Asamblea General, en reconocimiento a la lucha de las mujeres por la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo.
En 1995, la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, proponen el empoderamiento de las mujeres, y la adopción de medidas “urgentes y continuadas para transformar las estructuras, las instituciones y las normas…que impidan progresar en materia de igualdad de género.”
Han transcurrido 50 años de la declaratoria de Año Internacional, 30 de la de Beijing, muchos más, desde las primeras luchas de mujeres por la igualdad; y, debemos seguir insistiendo, porque la desigualdad y las violencias de género no sólo persisten sino quizá se han vuelto más cruentas.
Se necesitan cambios radicales en: educación, usos y costumbres, empoderamiento efectivo, políticas públicas; normas y acciones firmes, de lo contrario en 30, 50 o más años, la lucha por la igualdad seguirá siendo urgente. (O)