La revista Forbes trae un artículo que dice que hay que respetar y cuidar el medio ambiente, tomando en cuenta que el Ecuador es un país con una muy rica biodiversidad, pero que afronta una crisis ambiental sin precedentes en su historia. La pérdida de biodiversidad y los efectos del cambio climático son un desafío del presente. Importan la vida cotidiana, nuestra economía y la presencia de nuestro entorno; sin embargo, la respuesta ha sido tomada con brazos caídos, no interesa mucho o casi a nadie. Así existen tres frentes que hay que afrontar: la contaminación por plásticos, la reducción de la biodiversidad y la mitigación del cambio climático.
La contaminación por plásticos es grave, ya que los estudios indican que 1,14 millones de toneladas de residuos al año están inundando nuestras ciudades; los plásticos terminan en los ríos, mares, ecosistemas, modificando el paisaje y las cuencas hídricas que abastecen a millones de personas. Reducir la biodiversidad es otra tarea que señala el artículo.
Cada hectárea que se pierde equivale a menos aire puro, menos agua limpia y menos oportunidad para las comunidades. Como dijimos, el Ecuador es uno de los países más biodiversos del mundo y hay que cuidarlo como oro en polvo. La tercera amenaza que señala el estudio es la mitigación del cambio climático, la que poco nos preocupa, pero que en realidad es un asunto de vida o muerte. El cambio climático que afecta visiblemente al país nos está avisando. Las sequías prolongadas, las lluvias torrenciales y la modificación de los patrones climáticos que impactan a la agricultura, al turismo y a la calidad de vida. La solución es invertir en energía renovable y financiar las acciones por el cambio climático. (O)