Mejor sin el acostumbrado show ni el estilo de evadir. Menos, con la fórmula del ataque y el no ha pasado nada aquí. Evitando las frases trilladas y que esta vez puedan quedar verdaderas razones al país. Responda. Conteste. No hace falta quitarse ni ponerse lentes. Tampoco titubear o guardar silencio. Tan solo responda.
Para el debate presidencial. ¿Qué candidato puede defender la dolarización con políticas serias y fuera del discurso del baratillo? Es decir, ¿quién entrega seguridad al sistema monetario y financiero? ¿Puede sostener que no se tomará las reservas de los depositantes y del Estado, tiene una política fiscal permanente, cuida la autonomía del Banco Central, establece un máximo y mínimo de endeudamiento público y pasa del discurso de enmienda constitucional -sin sentido y que no llegará- a acciones que garanticen la vigencia de la única moneda dólar sin “ecuadólares”, “dolarización a la ecuatoriana” o “chavitos”? ¿Puede traer a un ejército -probado- extranjero a combatir los ataques que vive el país?
¿Tiene capacidad de firmar su rechazo a la dictadura de Venezuela o de Cuba que ha llevado al exilio a sus nacionales? ¿Le dejan (léase es independiente de sus acciones) distanciarse de los gobiernos autoritarios que persiguen a opositores? ¿Va a imponer una Ley de Comunicación para decir qué es verdad y qué no lo es? ¿Cumplirá irrestrictamente las sentencias de la justicia del país? ¿No se tomará la institucionalidad para delinquir o hacer grupos son alias (al estilo delincuencial) para tomarse el aparato estatal, nombrar funcionarios de control y buscar la impunidad? ¿Puede firmar que no pretenderá la liberación de sentenciados por vía de salvo conductos, refugio, medidas cautelares internacionales o artimañas? ¿Va a defender la República o la venganza? Facilito responder.
¿Entregará a las universidades autonomía o engorrosas y ocenas regulaciones para controlarlas, intervenirlas y tomárselas? ¿Permitirá que los estudiantes puedan elegir qué carrera y en dónde estudiar, o será como el sistema que el Ecuador tuvo hace poco y definía el Estado en dónde y qué estudiar? ¿Va a pactar con los grupos terroristas o a combatirlos? ¿Invadirá con publicidad o permitirá que las obras hablen por sí solas? ¿Pondrá a gente preparada en la función pública o a incondicionales sin voz ni voto?
Lo más importante. ¿Cree en la democracia o en tomársela para siempre al día siguiente de su posesión para no devolverla nunca más? Con estas preguntas, fuera otra cosa el debate presidencial. (O)
@jchalco