En la selva de la vida

La selva comprende los árboles, estudiados por la silvicultura en cuya comunidad, el bosque,  encontramos la génesis de la vida, la biodiversidad,  los ciclos del agua, del nitrógeno, del fósforo, del carbono, etc. el orden es perfecto, todo implica disciplina, fotosíntesis, hormonas, luz y sombra, humedad y la presencia de todas las formas bióticas en comunidades biológicas de especies en cada ecosistema, en donde se engendra un equilibrio interactuante de relaciones biocénicas, término propuesto por Karl Möbius, biólogo alemán, en 1879. Las selvas tropicales son los ecosistemas vivos más antiguos del planeta, con más de 70 millones de años, destinados a regular el clima y sustentar a la VIDA. Proporcionan servicios ambientales como generación de oxígeno, permiten que el agua de lluvia se filtre al subsuelo y se recarguen los acuíferos, mantienen la fertilidad al gestar materia orgánica, capturan el bióxido de carbono, producen medicinas, alimentos, materia prima para la construcción o elaboración de artesanías y textiles. Son además reguladores del clima y las precipitaciones, sustentan la presencia de toda forma biótica con las cadenas tróficas o alimentarias entre vegetales, herbívoros y carnívoros.  Ningún animal caza más presas que las necesarias para satisfacer sus necesidades, por ende, alcanza para todos en orden y perfección dictaminados por la sabia natura.

En la selva de la vida del Homo sapiens, las cosas son absolutamente diferentes, se aniquila todo, se vive a costa de agredir al congénere, no toleramos que otro sea el primero, la corrupción baña casi todo, la guerra es el arma del poderoso y la muerte alimenta su voraz apetito de poder. La miseria campea por doquier y es gestada por el mal inmerso en la mente de los líderes, de los caciques y de quienes se sienten dueños de sus pueblos, sin auto valorarse en lo minúsculos y efímeros que somos.

Desvergonzados y engañadores de oficio, desean enquistarse en el poder, cubiertos de soberbia, arrogancia y desprecio a los demás, dueños de todos quienes se inclinan reverentes ante lo fútil, que como en este siglo gobernado por las fuerzas del narco delito, en proceso metastásico, invaden todos los estamentos de la sociedad, a vista y paciencia de un obnubilado pueblo que temeroso sufre diariamente los atropellos de la selva de la vida.  (O)

Dr. Eduardo Sánchez

Doctor en Química por la Universidad de Cuenca. Excatedrático de la Universidad de Cuenca. Director del Proyecto “Reproducción de orquídeas por semillas”. Conferencista y articulista internacional.

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