El día de hoy sábado 12 de abril Cuenca conmemora un año más de su fundación española; una ciudad asentada geográficamente en lo que históricamente se conoció primero como Guapondelig (en la época cañari), y luego como Tomebamba (en la época del incario).
En varias ocasiones, y como parte ya de la República de Ecuador, su presencia y lucha han estado presentes en defensa de la integridad y la libertad de la patria; particularmente cuando esta ha tenido que vivir días aciagos con dictaduras, abiertas o embozadas, civiles o militares, que pretendieron coartar las libertades y el espíritu libérrimo que nos legaron nuestros antepasados.
Cuenca ha sido, en este sentido, un Cantón con un pueblo de ancestral espíritu libertario, con una opinión política crítica y cultura democrática, poco proclive a adherirse a los aventurerismos politiqueros, y a aquellas prácticas que denigran a la política, como la demagogia, el engaño, el oportunismo, la prepotencia y la corrupción.
Pero Cuenca, y sus habitantes, no solo se ha caracterizado por su virtud cívica y su compromiso con la libertad y la democracia; sino también por ser un pueblo orgulloso de su identidad cultural, signada por la peculiaridad de sus valores, tradiciones, costumbres, símbolos y por la forma particular de su lengua, marcada por la simbiosis entre las voces españolas y las voces quichuas.
Una ciudad donde la cultura artística e intelectual constituye una constante en su dinámica social; una ciudad académica y universitaria; una ciudad “Patrimonio cultural de la humanidad”, un tributo a su singular belleza, donde se articulan lo moderno con lo colonial.
Una ciudad pujante y emprendedora en lo económico, donde confluyen diversos sectores productivos, empresariales, artesanales, cooperativos; aunque todavía quedan por resolver problemas como el desempleo y subempleo que afecta a un importante sector de la población.
Una ciudad que, a pesar de los problemas que históricamente ha sufrido por el centralismo, ha sabido sobreponerse a las situaciones difíciles, pugnar por su desarrollo y reivindicar su derecho a un trato justo y equitativo frente al resto del país; una situación que particularmente se ha presentado en el curso de la gestión de diversos Gobiernos de turno. (O)