Se agotaron todos los recursos éticos y no, de parte y parte para lograr la votación victoriosa. El debate, que no fue otra cosa que una presentación de sociedad de dos quinceañeros timoratos, confirmó lo que se previa. Estamos en una encrucijada vital para nuestra suerte y las redes sociales atiborran los espacios con cosas a tomar en cuenta y otras que ni merecen ser abiertas, pero si respetadas por ser una opinión, que a mí personalmente no me interesa, es otro cuento. En uno de estos mails aparece algo que es para mí, verdad fundamental. “sí me equivoco dando el voto a Noboa, será por 18 meses y si gana Luisa “correista” tendremos dictadura sanguinaria de 20 a 50 años”
Puesto esto como centro de debate, la argumentación lógica y verás de una persona que esta preocupara por el Ecuador y su futuro, sería: Noboa, joven y talvez empujado por capricho de su grupo económico multimillonario de tener en su familia un presidente, viene con algunos títulos universitarios muy importantes de prestigiosas universidades extranjeras y aparentemente buena voluntad, cosa que podría ser muy positiva en nuestras economías y desarrollo. Lo que propone de ir contra todo lo que es narcotráfico y cierre de fronteras con ayuda de EE.UU. no puede ser más positivo. El reorganizar o eliminar algunos entes de control del estado y promover una justicia ciega y buena en contra de toda la maraña del intrincado estatus actual para perseguir detractores y para obtener impunidad de mafiosos y crimen organizado, se debe impulsar. Caso contrario podría imperar en el país, una horrenda y fatídica dictadura. Las cárceles, las leyes de microtráfico de droga, el ingreso de delincuentes y la eliminación de decenas de organizaciones como lobos, tigerones, etc que tomaron fuerza con el apoyo del expresidente con los cuales se tomaba fotos y compartía y con los que tiene aún esplendida relación su patrocinada doña Luisita, debe ser desmantelada. Acompañada ella de su binomio, que propone sacar de la pobreza al Ecuador, recogiendo el oro y minerales de celulares viejos, va pareciendo una senda diletante.
Yo no hay duda de mi voto por Noboa, último recurso, esperando que se organice con buenos asesores y gobiernos duchos en estas luchas y que en el poco tiempo arregle cárceles, narcotráfico, organismos de control, sería más que suficiente, mientras que, si gana “Luchita la que ya lo hizo”, tendremos que buscar algún país que nos acepte para vivir los últimos días alejado de la miseria como son Cuba y Venezuela, camino al que iríamos sin remedio. (O)
