El Presidente Daniel Noboa completó su gabinete ministerial cuadro días después de asumir el mando.
Los flamantes ministros y secretarios, uno de ellos reciclado del gobierno anterior, posaron para la foto oficial junto a Noboa, pero sin la presencia de la Vicepresidente Verónica Abad, un hecho sin precedentes en los últimos cuarenta años.
Predominan las mujeres sobre los varones, la mayoría, menor a los 35 años de edad.
Según la cuenta X de la Presidencia, de esa forma comienza “el camino hacia al nuevo Ecuador. Juventud y experiencia para trabajar por los ecuatorianos”.
Al posesionarse, Noboa dijo haber pedido a sus colaboradores fijar la agenda con metas claras y someterse a evaluaciones para medir los resultados.
Pero ¿quién marca la pauta? ¿cuáles son los lineamientos básicos del nuevo gobierno? ¿cuáles son las políticas de Estado a implantarse para lograr ese “nuevo Ecuador”?
La mayoría de ministros recién estrenarán en el sector público su preparación académica, destacable por supuesto, incluso los bríos juveniles y las buenas intenciones del nuevo régimen.
Ojalá, por el bien del país, el romance incipiente no se estrelle con la realidad, durísima a toda prueba.
Por eso mismo se requiere conocer las líneas fundamentales del gobernante, en especial en áreas críticas como la economía, la seguridad ciudadana, la falta de trabajo, cuyo sobrepeso recae sobre los jóvenes.
Un Estado desesperado por dinero, no fácil de conseguirlo en un santiamén; igual por tantas deudas internas y externas; asediado por el crimen organizado y la delincuencia común, requieren, a más de bríos, de certezas, un norte. El responsable de darlos es el Presidente.
Justo es decirlo, hasta el momento únicamente ha referido generalidades y frases cuyos alcances son diseccionados “a la carta”.
Si llegó la hora de un gobierno joven, Noboa y su equipo ministerial deben apuntar directo al blanco, sin subestimar a nadie, ni pactar con los “viejo sabidos” de siempre. Para esto sólo tienen 18 meses.
